Rodrigo Moreno y la soledad

"No fue bueno que mi película entrara a la competencia de Berlín", confiesa Rodrigo Moreno, respecto de su segundo largometraje, Un mundo misterioso, que, tras varios tropiezos a la hora de la exhibición, optó por estrenar solamente en el Cosmos UBA (de jueves a domingo, a las 21.30) y en el Malba (los viernes, a las 20; los sábados, a las 22 ).El autor de El custodio está convencido que el extremo porteñismo de su película, que en septiembre participará en una sección especial centrada en el cine argentino del Festival de Toronto, se contradice con la mirada y, sobre todo, con los mensajes que en la Berlinale se esperan de nuestro cine. Por eso mismo, se vino con las manos vacías. Sin embargo, tiene una idea muy clara acerca del hombre que protagoniza su película que, tras una decisión sorpresiva de su pareja parece boyar de un lado al otro, algo perplejo frente a un mundo en el que las cosas ocurren y generan respuestas imposibles de responder. "Una amiga me dijo que la película es muy ventajosa, porque en ella se puede ver todo lo que una mujer se imagina cuando se separa de un hombre. «¿Qué hará cuando está solo? ¿Se podrá cocinar?», y que en ese sentido revelaba demasiada información acerca de la intimidad del hombre solo...