Producir huevos, una actividad afectada por el precio de los granos

Romper la cáscara y derramar prolijamente clara y yema sobre el aceite caliente es una escena repetida en muchos hogares argentinos. Tanto, quizá, como poner el frasco de mayonesa sobre la mesa, servir un plato de fideos o condimentar una comida con un producto deshidratado. Bien a la vista en algunos casos, no tanto en otros, y a veces sin que el comensal lo sospeche siquiera, el huevo está con frecuencia presente en el almuerzo o en la cena.Detrás de este alimento hay una actividad económica que incluye algún grado de especialización en el producto mismo, como la sugerida por el llamado "huevo omega3", y una cadena en la que se integran desde la fabricación de maples de cartón hasta la industrialización de alimentos y el aprovechamiento del estiércol, que se retira de las cabañas en cintas transportadoras para terminar, muchas veces, siendo abono de cultivos por su riqueza en calcio.Las cifras aportan hoy una curiosidad: en el país hay prácticamente una gallina ponedora por cada habitante. Son 41 millones de "aves en posición" ?como dicen los productores?, según datos aportados por la Cámara Argentina de Productores Avícolas (Capia). Con sus cacareos satisfarán un consumo interno que, para el año, está estimado en 226 huevos per cápita. La entidad proyecta una producción de 9880 millones de unidades, una facturación de US$ 800 millones y una rentabilidad que, por el alza de costos no acompañada por los precios, no llegaría para todos.Los números de ventas al exterior, 7100 toneladas por valor de US$ 33 millones, muestran una mejora respecto de 2011, cuando se vendieron 6388 toneladas por US$ 26,1 millones. Este año, además, se sumaron tres nuevos mercados de destino y hoy suman 59. En el plano interno la tendencia fue contraria: el año pasado había dos millones más de ponedoras que actualmente y la producción per cápita era de 261 contra las 244 unidades actuales.¿Qué pasó? "Es que la gente de campo siempre reinvierte y así hubo más producción, pero luego el precio se mantuvo y los costos crecieron mucho", dice Jorge Nazar, presidente de la Capia y de Avicoper,que destacó que el consumo per cápita era de 179 huevos en 2005, año al que siguió un crecimiento hasta 2011.Las principales subas de costos se dieron en el último año en el alimento para las aves. Según Héctor Motta, presidente del Grupo Motta, el mayor aumento fue el del valor del maíz, superior a 40%, seguido por el de la soja, estimado en 20 por ciento. "Hay que agregar el incremento de...