Mucho movimiento, pero nadie da explicaciones en la empresa

"Hola, somos del diario LA NACION..." La sola mención provocó dos respuestas inmediatas en el personal de seguridad que se encuentra en la entrada de la Compañía de Valores Sudamericana (CVS), : la simpatía inicial desapareció y, en menos de un minuto, apareció una persona que se identificó como el jefe de seguridad, aunque no dijo su nombre.Al atravesar la puerta de vidrio de la empresa, situada en el km 24,5 de la ruta Panamericana -a unos 150 metros de la salida de la ruta 202-, en Don Torcuato, partido de Tigre, el visitante ingresa en un molinete que va desde el techo al piso -como si fuera una jaula- y es recibido por el personal de seguridad. "Están tomando fotos", fueron las escuetas palabras del hombre detrás del mostrador, lo que dio lugar a la fugaz llegada del encargado de seguridad.La respuesta al pedido de entrevistas a los delegados gremiales o alguna autoridad de la empresa, como Alejandro Vandenbroele, su presidente, fue tajante: "Están ocupados", dijo. Ya en la vereda, detrás de la reja, se observaba el ir y venir de los 251 trabajadores, que evitaron todo contacto con LA NACION.Hoy la ex compañía de los hermanos Héctor y Nicolás Ciccone, que vendieron el 70% del paquete accionario a la Sociedad The Old Fund SA, "está funcionando muy bien", dijeron en la empresa.El traspaso de la ex Ciccone a The Old Fund ocurrió entre septiembre y octubre de 2010, aunque CVS tomó posesión de la planta a mediados de 2011. Vandenbroele irrumpió en el expediente y el 3 de septiembre depositó $ 567.000, en efectivo, en la cuenta judicial. Ese día, Ciccone pidió que levantaran su quiebra. El juez comercial Javier Cosentino...

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