Levinas y la Parábola del Buen Samaritano:quien interpela es el otro

• Autor: Sonia Spreafico

En Revista Científica Equipo Federal del Trabajo, n° 53)

Dice Levinas en Entre Nosotros: ensayos para pensar en otro “Nuestra relación con otro consiste ciertamente en querer comprenderle, pero esta relación desborda la comprensión. No solamente porque el conocimiento del otro exige, además de curiosidad, simpatía o amor, maneras de ser distintas de la contemplación impasible, sino porque en nuestra relación con otro, él no nos afecta a partir de un concepto. Es ente y cuenta como tal”.-

Es imposible pensar una ética latinoamericana sin transitar el pensamiento fecundo de este judío que tantas ideas luminosas dio al ideario de nuestra América. Para Levinas; cualquier construcción social e interpersonal se inaugura en el rostro del otro. Es el otro el que interpela; el que nos llama como tal, como otro. El otro, en Levinas, es la presencia REAL de Dios, no una presencia metafórica o simbólica, como algunos católicos, y cristianos en general, han entendido, equivocadamente a mi juico, leyendo en La Biblia, Mateo 25:34-40.-

La ética cristiana en numerosas ocasiones ha torcido el punto de partida de la relación ética leviniana (desde el otro hacia mí) a partir de una ligera lectura de otro texto bíblico de decisiva trascendencia a la hora de estructurar una ética desde el Tercer Mundo.-

Me estoy refiriendo a ese maravilloso relato bíblico conocido como La Parábola del Buen Samaritano (Lc 10, 25:37).-

“Dice el jurista: Maestro, ¿quien es mi prójimo?”. Y Jesús le contesta con la parábola. Y al final del relato, el Maestro de Nazareth invierte la pregunta: ¿Quién se hizo prójimo de este herido?.

La respuesta correcta a esa pregunta, la encontramos...