Inquieto, el Gobierno apura negociaciones

Apenas minutos después de que la amenaza de paro del gremio de los colectiveros se convirtió en una realidad, la Casa Rosada activó ayer las negociaciones para intentar levantar la medida, que impactaría negativamente sobre el humor social si se cumple la huelga de 24 horas en las líneas de ómnibus de corta, media y larga distancia.El Gobierno apuró los llamados para concretar una reunión, que se hará hoy, a las 10, en Balcarce 50, con la idea de destrabar lo antes posible el conflicto y así evitar el paro ya anunciado para mañana.El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, se pondrá al frente de la negociación. El funcionario dialogó con el secretario general del gremio de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), Roberto Fernández, para que finalmente se desactive la medida de fuerza. También participará la viceministra de Trabajo, Noemí Rial.El Gobierno activó todos los resortes para evitar la huelga en medio del comienzo de la segunda tanda de negociaciones paritarias de los gremios con fuerte peso a nivel de afiliados, como camioneros, ferroviarios o alimentación, para intentar una salida y evitar un efecto contagio.La preocupación de la Casa Rosada está concentrada en los sindicatos del transporte, que ya desafiaron al Gobierno en el último paro general que convocó el 10 de abril pasado el gremialismo opositor de Hugo Moyano y Luis Barrionuevo y que contó con la adhesión de los sindicatos antes aliados de la presidenta Cristina Kirchner.Ayer, apenas conocida la medida de fuerza, el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, reclamó...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR