Lágrimas y gritos en la residencia de Olivos

El lunes http://www.lanacion.com.ar/1648826-el-gobierno-sugiere-a-las-empresas-distribuidoras-que-hagan-cortes-de-luz-programadosla Casa Rosada. Cómo me gusta cuando, si de privaciones se trata, somos los primeros en predicar con el ejemplo. Yo estaba feliz con eso, hasta que habló , un iluminado en medio de la tiniebla de los cortes, y explicó que en realidad mucha gente estaba dándole y dándole al termostato del aire acondicionado para desestabilizar al Gobierno. http://www.lanacion.com.ar/1649511-edesur-admitio-que-las-tarifas-impiden-prestar-un-servicio-de-calidad. Habíamos tenido golpistas chacareros, empresarios, periodistas, gendarmes, prefectos, caceroleros y policías, es decir, todos grupos o sectores reconocibles, identificables. Pero, ¿cómo enfrentar la asonada destituyente de los acalorados? ¿Cómo se combate el golpe de los aires acondicionados?Con esa inquietud me presenté en el despacho de Coqui , un tipo que me cae definitivamente bien, por lo menos hasta que me bajen línea Cristina o y me digan que me tiene que caer horrible. Por ahora eso no pasa, así que en la charla con él intenté no tirar excesivas pálidas y disimular mi terror ante la advertencia de Víctor Hugo, que por cierto estaba analizando la crisis climática y política desde la playa en Río de Janeiro. Copacabana siempre es inspiradora de agudas reflexiones.Con una extraordinaria franqueza, Coqui me puso en autos. "A Víctor Hugo casi a diario le bajamos línea por escrito, cualquier verdura, y él lee todo como un soldado. Es admirable: nada le da vergüenza, no pregunta, no cuestiona. Va y repite. ¿Cuánto vale un cuadro así?"Me imagino que debe valer mucho, pero la cuestión no es ésa, sino la de los termostatos. Yo mismo había puesto el aire de mi cuarto en 18 grados. ¿Estaba contribuyendo, sin saberlo, a un nuevo intento de derrocamiento de nuestro gobierno? El gran jefe de Gabinete no podía creer mi inocencia. "Mirá, este desastre lo armaron Néstor y con su política de tarifas subsidiadas, y ya no hay forma de solucionarlo. No en poco tiempo. Tenemos que rezar para que afloje el calor. De última, nos queda el recurso de que la temperatura no la difunda el Servicio Meteorológico, sino el Indec."Le planteé también lo del ascenso de Milani, que hasta para muchos de los nuestros es la peor afrenta contra los derechos humanos que hayamos cometido. Pero mi inquietud no era filosófica, sino operativa. ¿Cómo podía venderlo? ¿Con qué argumentos defendía a un milico acusado de crímenes...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR