Garzón, el enviado de Peña al organismo

Para los incondicionales, las tareas más difíciles. Así se mueve por estos días el jefe de Gabinete, Marcos Peña. Para encarar la batalla por el control de la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (Afsca), uno de los bastiones de la resistencia kirchnerista, el ministro coordinador optó por uno de los hombres de mayor confianza de su círculo, Agustín Garzón.

El enviado de Peña tendrá la difícil tarea de ordenar un organismo colonizado por Nuevo Encuentro, la fuerza política que lidera Martín Sabbatella, que ayer se atrincheró en la Afsca. Con unos 1100 trabajadores y un presupuesto de $ 525.386.700, la Afsca tiene un funcionamiento deficitario.

Por lo pronto, ayer, Garzón presentó una denuncia penal contra Sabbatella por abuso de poder y por mantenerse en el cargo pese a haber sido removido.

Abogado -egresado de la Universidad Católica Argentina y con un máster en Derecho Administrativo (debe la tesis)-, de 39 años, Garzón llegó a la Afsca tras la decisión del presidente Mauricio Macri de intervenir el organismo por 180 días porque "sus autoridades no responden a la nueva estructura orgánica a la ley de ministerios".

Garzón, que es coordinador de profesionales Pro, comenzó a trabajar con Peña en 2003, cuando el jefe de Gabinete fue elegido legislador porteño. Entonces era su asesor. En 2007, se mudó junto con Peña a la Secretaría General porteña, hasta 2011. Un año después desembarcó como...