Gabriela Díaz, a los saltos

GUADALAJARA (De un enviado especial).- Gabriela Díaz se sintió atada desde su primer entrenamiento hasta el mismo instante de la definición del BMX. No se reconoció aquí como aquella imbatible medallista dorada de Río 2007, sino que fue otra, distinta, que tuvo conformarse con la presea de bronce. Le tuvo miedo a un escenario inhóspito, una pista -a criterio del equipo argentino- mal construida porque los saltos eran mucho más pronunciados que los de un trayecto normal. Una diferencia de un metro en el vuelo de la bicicleta respecto del recorrido de tierra que hay en Ezeiza, por ejemplo. La UCI (Unión Ciclística Internacional) no quiso hacerse cargo del diseño de la pista panamericana y quedó a cargo de un particular, que construyó un circuito más semejante a un espectáculo de supercross, con saltos imponentes para favorecer a la TV. "Los saltos no deben ser hacia arriba, sino hacia adelante", apuntó el entrenador Flavio Vacarezza. Entonces, ganó la carrera la que mejor se adaptó al medio. En este rubro dominó sin oposición la colombiana Mariana...