Cuenca Matanza-Riachuelo: Otro fallo ejemplar

AutorNorma H. Rozadas

A partir del fallo de la Corte Suprema de Justicia de la Nación en el 2006, el Juez Luis Armella, juez Federal de Quilmes, dictaminaba sus fallos sobre la base de las presentaciones de ACUMAR, con reiteradas postergaciones de obras y pedidos de prórroga. Por eso el Juez Armella ordenó una visita “in situ” al predio de Lanús para constatar la obra que debía finalizar el 27 de octubre de 2009. De ahí que su reciente fallo muestra la “desidia” que los funcionarios de turno, desde antes de la ex funcionaria María J. Alsogaray, y especialmente desde la consolidación de ACUMAR, con Romina Picolotti a la cabeza, tienen sobre el tema de la Cuenca Matanza-Riachuelo, un foco de contaminación latente, constante y en crecimiento.

En el fallo se lee:

"Se encuentra acreditado un incuestionable incumplimiento de la ACUMAR y del municipio de Lanús, lo que deja evidenciada una inexcusable falta de compromiso para el efectivo cumplimiento de los objetivos fijados en el fallo dictado por la Corte", sostiene Armella, en uno de los argumentos de su fallo.

"Resulta intolerable que la autoridad escude los continuos incumplimientos de hecho y de derecho a través del deslinde de responsabilidades en otros organismos o amparándose en respuestas disuasivas y remisiones a impedimentos de orden administrativo dado el carácter extraordinario que se debe procurar de esa autoridad", ….” Ha llegado el momento de que los gobernantes entiendan que el digno cargo con que los integrantes de la sociedad los han envestido no conlleva únicamente una mera administración burocrática, sino que les exige un enorme compromiso personal que incluye asumir y responder ante éstos por sus acciones contrarias a las búsquedas del bien común….”-

Tanto Homero Bibiloni, Secretario de Medio Ambiente de la Nación y Presidente de ACUMAR, como Darío Díaz Pérez, Intendente de Lanús, han sido sentenciados con multas por “incumplimiento de la orden judicial”, por no haber construido el muro perimetral en el predio de Lanús, complejo ACUBA, de 36 has, de superficie y con un costo de $ 2.270.000, destinados a su construcción. En 1983 el predio fue cedido por la Provincia de Buenos Aires a la Asociación de Curtidores Bonaerenses, por el período de 50 años, para el funcionamiento de un polo curtiembrero, de la planta de efluentes de residuos industriales de las curtiembres y una planta de tratamiento de efluentes cloacales. En el 2007 el predio fue usurpado y nunca se construyó nada, y hoy cuenta con un...

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