Confirman que el policía estuvo secuestrado

El oficial mayor en una fecha "significativamente posterior" a la de su desaparición, ocurrida el 14 de julio pasado en la ciudad rionegrina de San Carlos de Bariloche, lo que refuerza la hipótesis de que el policía estuvo cautivo durante un tiempo.

El fiscal penal Martín Govetto reveló ayer a la prensa que, según los primeros peritajes realizados sobre el cadáver de la víctima, la causa de la muerte fue un tiro que recibió en la cabeza; además, presentaba otra herida en una pierna, que también podría ser de bala.

"Fue ultimado en una fecha significativamente posterior a la de su desaparición", afirmó el funcionario judicial; sostuvo que el trabajo de los peritos del equipo de Criminalística de la Gendarmería Nacional y de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) continúa, una parte en Buenos Aires y otra, en San Carlos de Bariloche.

Entre los especialistas que fueron enviados desde Buenos Aires figura un entomólogo de la Gendarmería, que es el encargado de determinar el momento de la muerte. Esa fuerza aportó también dos peritos balísticos y un forense, que fueron convocados ante la sospecha de la participación de policías de Río Negro en el crimen.

Sobre la base de los primeros resultados confirmados, los investigadores creen que Muñoz, de 29 años, fue llevado vivo -no se sabe aún si con su consentimiento o contra su voluntad- desde las cercanías de la comisaría 42», donde prestaba servicio en la ciudad de San Carlos de Bariloche, hasta un lugar aún no identificado, donde permaneció cautivo hasta que lo asesinaron, uno o varios días después.

Ayer, los restos del policía asesinado fueron inhumados en el cementerio de la localidad de Ministro Ramos Mexía, en Río Negro, donde reside la familia de la víctima.

La ceremonia fue acompañada por una multitud silenciosa...