Conectados, la pasión familiar de los Lange

Por Federico Cornali LA NACION

Sólo pasaron 50 minutos desde que Santiago Lange abandonó las frías aguas marplatenses. "Aguantame que dejo el bolso, por favor", dice con un tono cordial y distendido. Pide una milanesa napolitana para su hijo, Klaus, y se prepara para charlar.

Todo aquel que desconozca la disciplina y el presente que envuelve a Santiago debe entender que encontrar al mejor regatista nacional en nuestras aguas, en pleno enero, y en medio de una competencia es, cuanto menos, una curiosidad. Pero aquí está, en merecido descanso de las pruebas con el equipo sueco Artemis Racing, que se encuentra en preparación para buscar la clasificación para la Copa América 2013, en San Francisco (EE.UU.). En realidad, las vacaciones terminaron siendo una oportunidad más para desarrollar su pasión, con un agregado familiar...

El Mundial de la especialidad 29er del yachting, certamen que terminó anteayer en Mar del Plata, tuvo al doble medallista olímpico (bronce en Atenas 2004 y Pekín 2008 en la Clase Tornado), como un participante más. Sin embargo, esta vez, el objetivo no fue el de siempre, estar en el podio. La motivación estaba justo al timón de su embarcación. Klaus Lange, su hijo de 15 años, necesitaba un tripulante con experiencia, algo que encontró en su padre (N. de la R.: tiene otros tres, Yago, Theo y Borja).

"Es una de las tantas cosas lindas que te da este deporte. Si te mantenés en actividad, podés compartir una experiencia como ésta, con tu hijo y en tu país", explica orgulloso Santiago.

-¿Y cómo fue la relación padre e hijo sobre la embarcación?

-Nos llevamos muy bien. Sin embargo, tuvimos nuestra parte crítica, porque no conocíamos el barco. Hubo varios roces, pero quedaron en eso. Lo importante es que nos divertimos, que fue el motivo por el cual decidimos hacer esto juntos.

-¿Qué dice Klaus acerca de la relación con su papá/compañero de equipo?

-"Y... a él [Santiago] no le gusta perder a nada."

-¿Y a vos?

-A mí tampoco, ¡je, je!

Más allá de la broma, Klaus cuenta cómo les fue en el torneo: "El objetivo nuestro era entrar en la Flota de Oro, y lo logramos. Después, vimos que podíamos estar mejor y queríamos llegar más arriba". Finalmente, quedaron en el 19° lugar.

Ahora es Santiago el que continúa contando sobre esta inolvidable experiencia.

-¿Klaus está pensando en seguir tus pasos?

-[Toma aire y piensa un rato]... A él le gusta navegar, y claro que tiene mi apoyo, pero lo tiene como podría tenerlo si se hubiera dedicado a...