Sentencia de TRIBUNAL ORAL EN LO CRIMINAL NRO. 23 DE LA CAPITAL FEDERAL, 11 de Noviembre de 2016, expediente CCC 061432/2015/TO01

• Fecha de Resolución: 11 de Noviembre de 2016
• Emisor: TRIBUNAL ORAL EN LO CRIMINAL NRO. 23 DE LA CAPITAL FEDERAL

Año del B. de la Declaración de la Independencia Nacional Poder Judicial de la Nación TRIBUNAL ORAL EN LO CRIMINAL NRO. 23 DE LA CAPITAL FEDERAL CCC 61432/2015/TO1 Buenos Aires, 11 de noviembre de 2016.

Y VISTO:

Se reúnen los jueces de este Tribunal Oral en lo Criminal N° 23, J.A., quien presidió el debate, L.M.R. y C.A.R.M., actuando como S.S.M.G., con el objeto de redactar los fundamentos del fallo dictado el 4 de noviembre de 2016, en la causa N° 4906 (61.432/2015) seguida por el delito de homicidio simple, seguida contra S.D.R., titular del documento de identidad argentino nro. 27.775.019, nacido con fecha 19 de noviembre de 1979 en Avellaneda, provincia de Buenos Aires, soltero, empleado metalúrgico, hijo de M.A. y de S.M., con último domicilio denunciado en Perito Moreno y B., manzana 9, casa 175 de esta ciudad, actualmente detenido en el Complejo Penitenciario Federal N° I de Ezeiza.

Fecha de firma: 11/11/2016 Firmado por: J.A., JUEZ DE CAMARA Firmado por: L.M.R., JUEZ DE CÁMARA Firmado por: C.A.R.M., JUEZ DE CÁMARA Firmado(ante mi) por: S.M.G., SECRETARIO DE CÁMARA #27983612#166762033#20161111144012881 Intervinieron en el debate, en representación del Ministerio Público Fiscal, el F. General F.C., y a cargo de la defensa de Roa, el Dr. I.C. y Dra.

M.C..

Y CONSIDERANDO:

1. La acusación.

   El representante del Ministerio Público requirió la elevación a juicio respecto de S.D.R. en los siguientes términos (fs. 331/333):

   [...]Se encuentra probado, en el grado exigido para su

   elevación a juicio, que con fecha 19 de octubre de 2015, siendo

   aproximadamente las 11:00 hs., S. se encontraba en

   el interior de la finca sita en Plumerillo 3458, domicilio de Ramón

   Dalmiro Sandoval, con quien tenía una relación comercial y de

   confianza. En tales circunstancias y valiéndose de un elemento punzo

   cortante, atacó a S. causándole un corte en el cuello, producto

   del cual falleció al día siguiente, tras ser internado y atendido en el

   Hospital General de Agudos Parmenio Piñero[...].

   El A.F. calificó el hecho como constitutivo del delito de homicidio Fecha de firma: 11/11/2016 Firmado por: J.A., JUEZ DE CAMARA Firmado por: L.M.R., JUEZ DE CÁMARA Firmado por: C.A.R.M., JUEZ DE CÁMARA Firmado(ante mi) por: S.M.G., SECRETARIO DE CÁMARA #27983612#166762033#20161111144012881 Año del B. de la Declaración de la Independencia Nacional Poder Judicial de la Nación TRIBUNAL ORAL EN LO CRIMINAL NRO. 23 DE LA CAPITAL FEDERAL CCC 61432/2015/TO1 simple, y consideró que S.D.R. debía responder en calidad de autor.

2. La declaración indagatoria.

   En la ocasión prevista en el art. 378 del Código Procesal Penal de la Nación, el acusado S.D.R. manifestó:

   “[...] que el día del hecho se cruza para la casa de R.

   que está frente a la metalera. Le avisó que se iba al cardiólogo al

   mediodía. Le tenía que dar $ 5000 para seguir trabajando ese día.

   Estuvieron hablando ahí y cuando se va, abre la puerta y

   automáticamente se mete un hombre para adentro que le dice

   Q. quieto viejo

   y lo apuñala. Le tira dos o tres puñaladas y

   R. se cae al piso. Cuando se cae él le dice “pará, pará” y trata de

   frenarlo y el hombre lo ataca y le corta el tendón del dedo izquierdo y

   con otra puñalada él agarra la hoja y le corta la mano. El atacante se

   asusta y retrocede un paso, él entonces se va para la oficina de

   R. y empieza a gritar, para llamar a la señora S., que es la

   cuñada de R.. En un momento escucha un portazo, que se cierra

   el portón. Se asoma para el garaje y lo ve a R. tirado en el piso,

   se acerca y lo ve cortado en el cuello, quería hablarle pero no podía.

   Corre para el comedor y desde una ventana que da para el patio

   empieza a gritar a S., que estaba arriba. Estaba desesperado,

   sale para afuera y en una pileta se lava la mano que le sangraba

   mucho. Quiere buscar el picaporte o la llave en la oficina para abrir la

   puerta, no lo encuentra, no sabe si de nervios o de susto. Cuando va

   saliendo de la oficina, baja la vecina de R. que vive al lado y le

   pregunta “¿Qué pasó?”. Y él le responde “No sé, parece que nos

   quisieron robar”. Ella lo mira y vuelve a subir y lo deja solo. Se acerca

   Fecha de firma: 11/11/2016 Firmado por: J.A., JUEZ DE CAMARA Firmado por: L.M.R., JUEZ DE CÁMARA Firmado por: C.A.R.M., JUEZ DE CÁMARA Firmado(ante mi) por: S.M.G., SECRETARIO DE CÁMARA #27983612#166762033#20161111144012881 a R. y lo trata de levantar, porque se estaba ahogando con la

   sangre. En eso baja por la escalera este muchacho J. y él

   encuentra el picaporte y abre la puerta. Cuando sale, estaba su

   hermano. Él le dice “Gordo, sácame el handy así lo llamo al C.”,

   porque por cómo tenía la mano, no podía ni meterla en el bolsillo. Lo

   llama a C., el sobrino de R., y le dice “V. urgente

   para acá”. Y se viene. Se vuelve a meter a verlo a R. y se da

   cuenta como que le quería decir algo, pero no le salía la voz. Luego

   viene C. y automáticamente, antes de ver a R., viene a

   acusarlo a él: “Fuiste vos, vos lo apuñalaste a mi tío”. Él se sale para

   afuera porque C. le quiso levantar la mano y se sienta en la

   vereda. Ya estaban todos los G. y un montón de gente.

   C. vuelve a salir y lo acusa otra vez, diciendo: “Fuiste vos, vos

   apuñalaste a mi tío”. Salta la madre de C. y le dice: “Estás

   nervioso, quédate tranquilo, él no fue”, y poco más C. le levanta

   la mano para que se calle. S. le dice: “S., yo te escuché

   gritar a vos, pero no bajé porque tenía miedo”. Lo dijo delante de

   todos los G.. De ahí se cruza y se le acercó un G. y

   le preguntó qué había pasado, él le explicó la situación, y el otro le

   dijo que si tenía forma de ir al hospital, fuera, porque se estaba

   desangrando, le salía sangre de la mano como una canilla. Vino su

   mujer y M., que lo llevaron en auto al hospital. Lo atendieron

   y luego sale y preguntó cómo estaba R. y le dicen que lo habían

   operado y estaba estable. Le pregunta a un G. di tiene que ir

   a la Comisaría, y le responde que vaya, para que le tomen

   declaración. Salió con su mujer y ve a un patrullero y le preguntó si lo

   podían llevar a la Comisaría. Le dijeron que sí y lo llevaron. Cuando

   llegó, lo hicieron esperar como dos horas afuera. Ahí ya estaba

   C. con su abogado y testigos, denunciándolo a él de que

   supuestamente había apuñalado a R.. Que la única puerta que

   había se abre con un control automático o con el picaporte. Cuando

   R. abre la puerta, se aparece el hombre se mete para adentro y

   lo apuñala a R.. R. abrió la puerta con el picaporte. Dice que

   Fecha de firma: 11/11/2016 Firmado por: J.A., JUEZ DE CAMARA Firmado por: L.M.R., JUEZ DE CÁMARA Firmado por: C.A.R.M., JUEZ DE CÁMARA Firmado(ante mi) por: S.M.G., SECRETARIO DE CÁMARA #27983612#166762033#20161111144012881 Año del B. de la Declaración de la Independencia Nacional Poder Judicial de la Nación TRIBUNAL ORAL EN LO CRIMINAL NRO. 23 DE LA CAPITAL FEDERAL CCC 61432/2015/TO1 él no encontró el picaporte en ese momento. Que él nunca abrió la

   puerta, la abrió R.. Él no podía salir, por eso gritaba, de la

   desesperación y el miedo que tenía. Cuando S. abre la puerta,

   él estaba detrás del nombrado. El atacante era morocho, de rulos;

   entre 35 y 40 años; de su altura, pantalón negro y campera azul

   oscura. En ningún momento les pidió nada, le dijo “Quedate quieto,

   viejo” y lo agrede a R.; cuando cae, lo ataca a él y recibe las

   heridas de las que habló, cuando trata de defenderse con las manos.

   Los cortes fueron en los dos tendones y la mano prácticamente no le

   sirve para nada. Dice que el agarró la hoja y el hombre tiró del lado

   del mango y ahí le provocó uno de los cortes. Cuando llega el

   muchacho él retrocede para atrás, dos pasos, más o menos.

   S. no llega a gritar nada, no le dio tiempo. La gente que dice

   que escuchó gritar a S. no es así, porque es imposible que él

   haya gritado. El único que gritó fue él. Él en todo momento llamaba a

   la señora que estaba hablando arriba. Gritó sólo “S., S.”. Y

   ella lo escuchó, porque después le dijo que lo había escuchado, pero

   que no bajó porque tenía miedo. Se le exhibe croquis de fs. 91.

   Explica sobre la disposición del lugar. Señala dónde se lavó las

   manos. Él grita cuando estaba el hombre, va para la oficina que está

   al lado. Se mete allí y empieza a gritar, a gritar, a gritar. Ahí ya se

   había ido el agresor, porque siente la puerta que se cierra. Se asoma

   y lo ve a R. tirado en el piso y la puerta errada sin picaporte. Le

   pregunta a R. qué había pasado, si estaba bien. Como que

   R. le quiere decir algo y le hacía señas de que tenía lastimado el

   cuello. Él va para el comedor, grita por una ventanita que da al patio, y

   no encontraba el picaporte ni la llave; se lava las manos para que

   pare la sangre; él quería abrir la puerta para pedir ayuda. Vuelve a la

   oficina para ver si encontraba la llave o el picaporte; cuando va a salir

   de nuevo, ahí baja la vecina, ahí ella le pregunta qué pasó, él le dice

   que cree que le quisieron robar, la mujer se va; él va a agarrarlo a

   R. para ver qué le decía. En ningún momento le dijeron nada de

   robo, no se llevaron nada, lo único que dijo el hombre fue “Quedate

   Fecha de firma: 11/11/2016 Firmado por: J.A., JUEZ DE CAMARA Firmado por: L.M.R., JUEZ DE CÁMARA Firmado por: C.A.R.M., JUEZ DE CÁMARA Firmado(ante mi) por: S.M.G., SECRETARIO DE CÁMARA #27983612#166762033#20161111144012881 quieto viejo”. No recuerda el nombre de la vecina; S. es la

   cuñada de S.. En ningún momento el agresor lo siguió a él, ni

   le dice nada; habrá pasado un minuto y se sintió el golpe de la puerta.

   Él no tocó la puerta de la oficina, se quedó en un rincón, al costado de

   la puerta, al lado del escritorio. La metalera queda enfrente y a la

   vuelta hay un galpón a donde llevan los metales después de pesarlos.

   En la parte de arriba de la casa vive R., el hermano de

   S., con la mujer, llamada S.. Él siempre tenía deudas de

   poca plata con R., dos mil pesos, que iban arreglando; R. le

   decía que le pagara cuando pudiera, por semana o por mes. S.

   le daba plata para que él comprara metales todos los días, que luego

   llevaban al depósito del mismo S., donde éste los...