La volatilidad se apoderó del precio de la soja en el mercado doméstico

Tras adquirir el viernes pasado unas 150.000 toneladas de soja en el ámbito de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), las fábricas redujeron ayer de 3000 a 2850 pesos su propuesta por cada tonelada disponible para las terminales de San Martín, San Lorenzo, Timbúes, Villa Gobernador Gálvez, Ricardone y de General Lagos. El resultado de la caída del precio de la oleaginosa se reflejó sobre el volumen comercializado, que rondó las 10.000 toneladas en la plaza rosarina.

Fuentes del sector comercial relacionaron ayer la tónica negativa del mercado con la apreciación del peso frente al dólar y con las ligeras bajas registradas en la Bolsa de Chicago. Y añadieron que la volatilidad de los precios domésticos expresados en pesos podría verse exacerbada en las próximas jornadas por la oscilación de la paridad entre las monedas y, sobre todo, por la brecha que separa el nivel actual de esa paridad de la especulación con la que buena parte de los compradores y de los vendedores trabajaron antes de la devaluación.

En los puertos del sur de Buenos Aires la soja se negoció con bajas de 100 pesos, dado que las propuestas de los compradores fueron de $ 2700 por tonelada para Bahía Blanca y de $ 2650 para Necochea.

Si bien no hubo ofertas abiertas por soja de la próxima cosecha (para entrega entre abril y mayo), la "idea" de precio vigente en el mercado se mantuvo en torno de los 215 dólares por tonelada para la zona del Gran Rosario y para Bahía Blanca.

En el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), la posición enero de la soja subió US$ 2 y cerró con un ajuste de 230,50 dólares por tonelada, mientras que el contrato mayo resignó US$ 0,10 y terminó la jornada con un valor de 216,90 dólares.

Tras dos ruedas alcistas consecutivas, las pizarras de la Bolsa de Chicago mostraron ayer quitas de US$ 0,37 y de 0,46 sobre las posiciones enero y marzo de la soja, cuyos ajustes resultaron de 327,48 y de 327,57 dólares por tonelada. El descenso fue producto de una toma de ganancias de los fondos de inversión y fue complementado por la devaluación del real frente al dólar, que llevó la relación entre ambas monedas de 3,949 a 4,023. Esta situación -lo mismo aplica con la devaluación del peso- afecta las aspiraciones exportadoras de los Estados Unidos, dado que su mercadería pierde competitividad frente a la de los países que devalúan sus monedas.

Maíz y trigo

Por tonelada de maíz los exportadores ofrecieron hasta $ 1900 para la zona del Gran Rosario, $ 50 más que el...