Con el gol de visitante, la revancha afuera no incomoda

Podría ser una casualidad, o una circunstancia pasajera, si no fuera porque son los protagonistas quienes reconocen las ventajas y conveniencia de definir de visitante las series eliminatorias. Es casi un cambio cultural en el fútbol, porque históricamente, con el sistema de partido y revancha, los equipos siempre aspiraron a jugar de local el segundo partido.Las referencias del campo propio, las comodidades de sentirse en casa y el apoyo de los hinchas conformaban el contexto más beneficioso para ir en busca del resultado necesario para la clasificación. Siguiendo este guión, a los que conseguían resolver la llave de visitante usualmente se les asignaba un mérito extra, relacionado con el coraje, la valentía o la personalidad para no dejarse arrastrar por un ambiente adverso. Hoy ya no es tan así, se considera como más natural y corriente festejar en estadios ajenos.Vayamos a los ejemplos concretos de los octavos de final de la Copa Libertadores. De los ocho que avanzaron a cuartos, seis lo hicieron en condición de visitante, en el extranjero: Nacional de Paraguay (en Vélez), Arsenal (en Chile, Unión Española), Atlético Nacional (en Belo Horizonte, Atlético Mineiro), San Lorenzo (en Porto Alegre, Gremio), Lanús (en Torreón, Santos Laguna) y Cruzeiro (en Asunción, Cerro Porteño).Ninguno de ellos fue a defender una amplia ventaja conseguida de local. San Lorenzo, Lanús, Atlético Nacional de Medellín y Nacional habían obtenidos triunfos por un solo gol de diferencia. Los otros dos, Arsenal y Cruzeiro, viajaron con el escaso botín de un empate. Las excepciones, los locales triunfadores, fueron Defensor (pasó por penales tras un 0-2 y 2-0) y Bolívar (2-2 y 1-1).Este panorama tiene puntos en contacto con lo que acaba de suceder en la Liga de Campeones. Atlético de Madrid y Real Madrid avanzaron a la final tras una demostración de poderío en Londres y Munich, respectivamente.Esta tendencia no habría sido posible sin...