Vinculan un secuestro con una venganza de narcos colombianos

No fue un secuestro común. Para los investigadores del episodio en el que dos empresarios fueron tomados cautivos el domingo pasado a la madrugada, estaría vinculado con la deuda que los secuestradores le reclamaban al menor de ellos. Aparentemente, el muchacho, de 28 años, licenciado en administración de empresas, le debía una importante suma de dinero a un familiar directo de un narcotraficante colombiano.Al cierre de esta edición, los investigadores de la policía bonaerense seguían dos pistas distintas sobre el móvil del secuestro. Debido a que ni el licenciado en administración de empresas, que habría sido identificado como Diego Fernando Filo, ni su cuñado, Gastón Bencent, de 39 años, declararon ante la Justicia ninguna de esas hipótesis figuraban en el sumario que se instruye en la fiscalía federal de San Isidro.Según habría relatado Filo a los policías bonaerenses que anteayer lo llevaron a la Delegación de Investigaciones de San Isidro, los secuestradores le exigieron que pagara una deuda de 600.000 dólares que tenía con la suegra de uno de los 30 colombianos acusados en el operativo Luis XV, que permitió desbaratar a una banda que lavó activos producidos con el narcotráfico y que se había instalado en nuestro país.La otra pista que seguían los investigadores apuntaba también a la existencia de una deuda de Filo con una mujer colombiana, pero difería en el monto. En este caso, la información que tenía la policía indicaba que la deuda que le reclamaban los secuestradores a la familia del licenciado en administración de empresas superaba el millón y medio de dólares y que la acreedora sería la hija de un importante narco colombiano, aunque no estaría relacionado con los acusados en el operativo Luis XV.Filo y su cuñado fueron secuestrados el domingo pasado a la madrugada, cuando circulaban en un Alfa Romeo Mito por la Panamericana rumbo a Nordelta. Fueron interceptados por cinco sospechosos armados en dos automóviles y los llevaron cautivos a una quinta de la zona de Moreno.Al principio, el caso se investigó como una averiguación de paradero, debido a que la hermana de Filo y esposa de Bencent radicó una denuncia al advertir que no llegaban a su casa. Pero, a última hora de la tarde, la mujer comenzó a recibir llamados extorsivos provenientes de una línea telefónica de Colombia, en los que exigían que pagaran la deuda o "que devuelvan lo que nos robaron".Entonces, el caso comenzó a ser investigado como un secuestro y se hizo cargo el fiscal federal...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR