El 'vale todo' de Massa no va más

Cerca de un 70% de la ciudadanía manifiesta, a través de prestigiosas consultoras de opinión, un importante rechazo frente a la figura de Sergio Massa. Así, el nuevo "superministro" de Economía sufre una desaprobación enorme, similar a las padecidas por Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner (CFK). Contrariamente, el nuevo ministro ha demostrado que supo ganarse la aprobación de gran parte del empresariado nacional, internacional y de los organismos multilaterales de crédito. Al parecer, en el corto plazo, lo que algunos pueden considerar su mayor "bajeza" le otorga la posibilidad de conquistar la "grandeza". Así, esa ductilidad para trasmutar de populista nacional y popular a neoliberal ortodoxo, es aquello que a los inversores del mundo pareció seducirlos . En este orden de cosas, Massa pudo finalmente persuadir al macroeconomista ultra ortodoxo, Gabriel Rubinstein, para que se erija en su viceministro y se encargue de gestionar la política macroeconómica.

Massa ocupó un rol central repentinamente en el abatido gobierno del Frente de Todos. Despegarse del modo "populista Massa 2019″ fue una gesto de astucia, ya que esto pudo darle chances de lograr cierta estabilidad antes política que económica, a poco de asumir como ministro.

En otro orden de cosas, los adoradores de Cristina nos venían contando, a todos y todas, y a Sergio Massa también, que si los fiscales por la causa Vialidad pedían la condena de Cristina, desobedecerían hasta las últimas consecuencias los fallos de la Justicia. Todos sabíamos que era una certeza casi absoluta que los fiscales, frente a la infinidad de pruebas recopiladas durante tres años por la causa en cuestión, iban a contar con los elementos necesarios para pedir que CFK sea condenada. Y esto pasó el lunes pasado. Los fiscales Diego Luciani y Sergio Mola solicitaron a los jueces una condena de 12 años de prisión y la inhabilitación perpetua para la expresidenta y actual vicepresidenta, y condenas para Lázaro Báez, Julio De Vido, José López y demás imputados.

¿Y qué pasó? Lo que nos adelantó tantas veces el núcleo duro kirchnerista, que, aunque Cristina cargue con cientos de pruebas que la incriminan como la jefa de una asociación ilícita que defraudó al Estado, si se pedía su condena, las "puebladas", amenazas y desbandes sociales escalarían en las calles. Y ya en la misma noche del anuncio de los fiscales contra la actual vicepresidenta se concentró en el barrio porteño de Recoleta el cristinismo...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR