Todos los jefes juntos, con agenda coordinada

Satisfechos, pero muy atentos a los próximos pasos del Gobierno. Y seguros de haber aprovechado la cita para dejar constancia de que la inflación, su impacto en las paritarias y el mantenimiento del nivel de empleo están al tope de sus preocupaciones.

Así se fueron de la Casa Rosada Hugo Moyano, Antonio Caló y Luis Barrionuevo tras la reunión con Mauricio Macri, que ayer recibió a los jefes de las tres CGT por primera vez juntos después de cuatro años.

Ante los micrófonos o en reserva, los tres apelaron a adjetivos como "buena", "cordial", "correcta" y "positiva" para describir la reunión. Valoran que el Presidente los haya recibido para "escucharlos" y aprovecharon para que la agenda de pendientes quedara clara una vez más.

El intercambio empezó con una ronda de exposiciones a cargo de los invitados. Además de Moyano, Caló y Barrionuevo, estuvieron Armando Cavalieri (Comercio), Gerardo Martínez (Construcción), Juan Carlos Schmid (Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte) y Gerónimo "Momo" Venegas (Uatre). El encuentro duró una hora.

Cada uno habló de la situación de su gremio, pero además se repartieron los temas comunes para que nada quedara afuera.

Todos mencionaron la escalada de los precios y el reclamo de paritarias "sin topes". Como era de esperar, Macri repitió que la expectativa del Gobierno es que la inflación anual no supere el 25% y volvió a pedirles (ahora en persona) "responsabilidad" a los gremialistas. "Creo en ustedes y confío en su experiencia", les dijo.

Ellos prometieron cautela. "No vamos a exigir barrabasadas. Sabemos hasta dónde pude dar la economía. Somos responsables", dijo uno de los invitados a LA NACION.

El alza de precios y la negociación salarial se llevaron buena parte del tiempo. Caló y Martínez le plantearon al Presidente que "no están viendo" un plan antiinflacionario detrás de las medidas aisladas anunciadas hasta ahora. Macri reiteró que bajar la inflación "va a llevar tiempo" y, otra vez, les pidió colaboración.

Caló habló de la situación de su gremio, la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), y puso sobre la mesa la preocupación, sobre todo de los gremios industriales, por los despidos y suspensiones. Esa preocupación explica buena parte de la cautela de los sindicatos. No quieren resignar puntos de recomposición salarial, pero saben que no...