The Bad Plus: el trío que sale de su propio molde

Para los que tienen la oportunidad de conversar con músicos (en entrevistas periodísticas, por ejemplo), es interesante descubrir la relación entre la manera que tienen estos artistas de hacer música y el modo en el que se expresan en una charla. A veces, es fácil identificar en la conversación a ese artista que sube al escenario; otras, parece que el que habla y el que sube a tocar, cantar y actuar fueran personas diferentes.En la manera de expresarse de los integrantes del trío The Bad Plus hay correspondencia entre música y personalidades. Si dejamos de lado el jetlag que se impone una hora después de haber bajado del avión que trajo al trío desde Nueva York, diremos que el pianista Ethan Iverson será el de las respuestas concretas y lacónicas como algunas de sus frases sobre el teclado; el contrabajista Reid Anderson tendrá palabras que servirán de marco de contención de los comentarios de sus socios, y el baterista David King hablará mucho, reflexionará de manera animada y entusiasta sobre la música en general y en especial sobre la de este trío que regresó para tocar esta noche, en Buenos Aires.The Bad Plus es un trío de jazz que no se comporta como tal, quizá por eso siempre habrá algo nuevo para escuchar en sus conciertos. Los muchachos se pueden conectar con nuestro país porque conocen a músicos locales como Guillermo Klein, porque Anderson habla algo de castellano –vivió en Barcelona un par de años–, o porque Iverson tocó tango en los 90 en Nueva York, con Pablo Aslan (además grabó para el disco Y en el 2000 también, del grupo Avantango de Aslan). También tuvo un primer acercamiento a la literatura de Borges y le encanta el estilo Pugliese.Pero la conexión real de The Bad Plus con el público que lo ve en los 160 conciertos que da al año es por esa música que se resiste a la clasificación y redefine al clásico trío de piano, contrabajo y batería. Se lo intentó ligar al rock, porque hace covers de Nirvana; a la clásica, cuando aborda piezas de Stravinsky, o al pop cuando echa mano a algún hit de Tears For Fears. Incluso, hace una década atrás se lo consideró un grupo experimental. "Creo que lo que hacemos es nuestro folk. La manera como pensamos y hacemos música es influencia de la vida de cada uno. Y eso no es un experimento", dice Anderson. La banda...

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