Desde septiembre será obligatoria la VTV en la ciudad

A partir de septiembre todos los vehículos registrados en la Ciudad deberán realizar la Verificación Técnica Vehicular (VTV) en siete talleres autorizados a los que se les sumarán otros dos antes de fin de año. El trámite, que promete ser ágil y rápido, será obligatorio para todos los automóviles con más de cuatro años de antigüedad o más de 60.000 kilómetros de uso. Las motos también deberán someterse a los controles anuales.

El gobierno porteño ya había decidido sumarse a la norma que está vigente en varias provincias, pero faltaba ponerle fecha al lanzamiento. La verificación se ajustará de acuerdo al último número de la patente de cada vehículo. En septiembre será el turno de las que culminen en 9, en octubre las terminadas en 0 y en noviembre las que finalicen en 1.

El cronograma se interrumpirá en diciembre y enero y se aplicará nuevamente en febrero, cuando deberán someterse a los controles los vehículos cuyas patentes terminen en 2. El orden continuará de la siguiente manera: marzo, 3; abril, 4; mayo, 5; junio, 6; julio, 7; y agosto, 8.

El costo del trámite se definirá en las próximas semanas, pero fuentes de la Secretaría de Transporte confiaron a LA NACION que la tarifa será de entre $600 y $700 para estar a tono con lo que ocurre en la provincia. Allí, el sistema funciona hace 19 años dividido en once jurisdicciones. El valor de la VTV es de $614 y los controles dependen del Ministerio de Infraestructura bonaerense.

En la Ciudad, no tener la VTV será considerado una infracción de tránsito con una multa de hasta $ 4600.

Cómo funcionará

Cada planta tendrá una capacidad de verificación de 600 unidades por día. Cuando estén operativos los nueve talleres se estima que podrán inspeccionar hasta dos millones de rodados al año, lo que representa toda la plaza automotor registrada en la ciudad.

En los vehículos se controlará la emisión de gases y ruidos, el sistema de dirección y tren delantero, frenos, suspensión, chásis, neumáticos, llantas, luces, seguridad y emergencia, y documentación. Los que superen la inspección estarán aptos para circular con la oblea correspondiente.

En los casos que se encuentren defectos leves habrá un plazo de 60 días para resolver los inconvenientes y en ese tiempo el vehículo podrá seguir circulando. En cambio, losque tengan problemas graves deberán salir de circulación hasta tanto no superen las deficiencias en un tiempo máximo de dos meses.

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