Las semifinales como visitante, una vara alta que cuesta demasiado

GLASGOW.- La Argentina fue muchas veces protagonista de la Copa Davis, desde la creación del Grupo Mundial, en 1981. Sin embargo, es la única potencia del tenis que no logró conquistar la Ensaladera. Luego de una década fuera de la elite (de 1992 a 2001), el regreso a la máxima categoría mostró al equipo nacional entre los mejores cuatro en varias oportunidades. Pero en muchas de esas semifinales, la Argentina debió actuar de visitante y, claramente, el resultado no fue favorable. De hecho, este fin de semana frente a Gran Bretaña, en la ciudad industrial y económica más importante de Escocia, será la décima que juegue de visitante. De las nueve anteriores sólo ganó una: en 2011, ante Serbia, en Belgrado.

En aquella serie, Tito Vázquez había logrado que Juan Martín del Potro y David Nalbandian convivieran con respeto. El tandilense derrotó por 7-6 (7-5), 6-3 y retiro a Novak Djokovic, que cuatro días antes había ganado el US Open. Dos meses más tarde, la Argentina perdió la final ante España, en Sevilla (1-3).

El equipo nacional cayó el año pasado frente a Bélgica, por 3-2, en Bruselas. En 2013, en el O2 Arena de Praga, la República Checa se impuso por 3-2 ante el conjunto que capitaneaba Martín Jaite. En 2010, también conducidos por Tito Vázquez, los argentinos consiguieron valiosos triunfos fuera de su casa sobre Suecia (3-2) y Rusia (3-2), pero en las semifinales con Francia, en Lyon, el local dominó ampliamente en el Palais des Sports de Gerland y ganó 5-0. En 2005, en Bratislava y con Alberto Mancini como capitán, Eslovaquia triunfó...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR