Números en rojo: el derrumbe de los superávits gemelos

Bastó sólo una década para que las políticas heterodoxas del Gobierno redujeran a polvo los dos pilares que garantizaron la estabilidad económica de los primeros años kirchneristas y dejaran seriamente comprometidas las bases para reconstruirlos. Cuando finalice 2013, la Argentina ya no tendrá los http://www.lanacion.com.ar/1647601-capitanich-afirmo-que-pese-al-deficit-el-estado-tiene-recursosfiscal y de cuenta corriente, http://www.lanacion.com.ar/1376915-gemelos-dos-pilares-del-modelo-en-problemasque apuntalaban un círculo virtuoso pródigo en dólares y pesos. Entre las causas de su destrucción están el insaciable gasto público, el aumento de los subsidios, el mal manejo de la cuestión energética, http://buscar.lanacion.com.ar/la%20inflaci%C3%B3n, el atraso del tipo de cambio y la falta de estímulos a la inversión en sectores clave como la infraestructura. ¿La reacción oficial? Mayor torniquete a la salida de dólares y una revisión en su idea de no tomar deuda, algo con lo que ahora empieza a coquetear.El superávit fiscal llegó a su pico en 2004, al alcanzar los $ 11.657,8 millones y representar 3,9% del PBI. A partir de ahí, un ritmo promedio de crecimiento del gasto de 30% anual hizo que se cayera por primera vez en déficit en 2009, cuando el rojo fue $ 7131,1 millones (-0,4% del PBI). En 2013, esa suma ascenderá a $ 74.106,4 millones (- 2,6% del PBI), según proyecta Nadin Argañaraz, director del Instituto de Análisis Fiscal (Iaraf).Para cubrir un hueco que cada vez se hacía más grande, el Gobierno recurrió desde 2008 a distintas cajas: empezó por la estatización de las AFJP y terminó por la utilización del Banco Central (BCRA), para financiarse por medio de reservas y de emisión. No sólo no pudo cubrir la brecha entre ingresos y egresos, sino que agravó la inflación, un factor clave para socavar también al superávit comercial.Marcelo Elizondo, director de la consultora DNI, afirma que este año el comercio de bienes y servicios ha dejado de ser un proveedor de dólares netos para la economía, en la medida en que el saldo conjunto será a fin de este año equivalente a cero.Durante el período en que el Gobierno recaudaba más de lo que gastaba, contaba con un excedente de pesos que empleaba para aceitar el engranaje de una economía basada en el fogoneo al consumo. Entre 2004 y 2006, esos pesos sobrantes servían para comprarle al BCRA los dólares que hacían falta para pagar los vencimientos de deuda. Al mismo tiempo, la entidad bancaria era alimentada de...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR