River encara su gran objetivo con un debut a 3700 metros

ORURO, Bolivia.- River tiene una relación de proximidad con la Copa Libertadores desde el momento en que es el equipo argentino con más participaciones (31, seis más que Boca y 12 más que Independiente), pero también de distancia, ya que tanto presentismo sólo redundó en dos títulos (1986 y 1996). Y en el último quinquenio ni siquiera mantuvo la costumbre de estar entre los clasificados. Esta noche (a las 22), frente a San José en los 3700 metros de Oruro, River volverá a la Copa Libertadores, de la que se despidió la noche de un 30 de abril de 2009, cuando un 3-0 a San Martín de Porres en el Monumental ni siquiera le alcanzó para superar la etapa de grupos. El fracaso de ese equipo dirigido por Pipo Gorosito ya era un presagio de lo peor que vendría; el club transitaba por el último año del mandato de Aguilar, luego llegarían Passarella y la debacle del descenso.

El último partido de River en la Libertadores lo tuvo a Marcelo Gallardo entre los suplentes. Vio cómo Gustavo Bou, por entonces una promesa de 19 años que hoy deslumbra en Racing, hacía uno de los goles. En el reencuentro con el torneo de clubes más importante del continente americano, Gallardo estará hoy otra vez en un banco, pero con más responsabilidades que hace seis años. Se pondrá al frente del gran objetivo de River en 2015. Ya lo dijo el presidente Rodolfo D'Onofrio bajo los efectos de la euforia por la reciente Recopa Sudamericana: "Queremos emborracharnos con las copas".

Más allá del ferviente anhelo, Gallardo no se deja llevar por la ansiedad en el debut. Los efectos de la altura lo...

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