Rafa Nadal empezó a curar heridas con el calor de la gente

¡Gracias por volver, Rafaaa!" Si después del mazazo recibido en el Abierto de Australia -caída en la 1ª rueda con Fernando Verdasco-, Rafael Nadal decidió viajar a Buenos Aires para defender el título y, sobre todo, intentar recuperar la energía y las buenas sensaciones, en su primera noche empezó a justificar la determinación. Es verdad que fueron pocos los momentos de lucidez y contundencia en su látigo frente a Juan Mónaco, pero sí los suficientes como para vencer -por séptima vez- a su amigo, por 6-4 y 6-4 y avanzar a los cuartos de final (se medirá hoy, no antes de las 16.30, con el italiano Paolo Lorenzi). Aunque más que por cualquier tipo de avance tenístico, el número 5 del tour y nueve veces campeón de Roland Garros se impregnó de cariño de un público que respeta su leyenda.

Por primera vez en la semana, las boleterías del Buenos Aires Lawn Tennis Club lucieron el cartelito de entradas agotadas. La fiebre por ver por tercera vez en el certamen a Nadal provocó que antes de las 18 una fila larguísima recorriera la zona de los bosques de Palermo. Las 5042 butacas del court central lucieron completas. También muchas escalinatas estuvieron atiborradas de gente mal ubicada. Guillermo Vilas, Gabriela Sabatini, Juan Sebastián Verón y Lucha Aymar fueron algunas personalidades del deporte que siguieron con atención el partido entre Rafa y Pico (precisamente, jugaron la última final).

A diferencia del año pasado, cuando el Matador avisó con un buen tiempo de anticipación que jugaría en Buenos Aires, en esta oportunidad su presencia -confirmada casi sobre el arranque del certamen- no obligó a hacer modificaciones estructurales u organizativas. Ya se había tomado la decisión de no montar la tribuna tubular extra con capacidad para 1200 personas que sí se utilizó en 2014 -cuando Rafa no pudo actuar en el BALTC por un virus- y 2015, y la misma no se alteró. La llegada del Matador, en tanto, sí impulsó a la organización a tomar algunos recaudos más en cuanto a la protección personal del jugador. Martín Jaite, director del Argentina Open, le contó a LA NACION que una vez confirmada la asistencia de Nadal, se comunicó con la misma...