El quinto Beatle

MELBOURNE.- Es un verdadero milagro. David Ferrer, el maratonista, el atleta del tenis, el deportista que corre hasta cuando está por ducharse, está sentado. Fresco, sin transpirar. Desenvuelto, sin una gota de sudor. No debe ser el mismo que les saca chispas a sus zapatillas, el que vuela de un extremo a otro para ganarle un partido de leyenda a Juan Martín del Potro en la final de Sevilla. No debe ser el mismo que se acomoda en la casilla número cinco del mundo, detrás de los cuatro fantásticos. No debe ser el mismo que acaba de lograr el título de Auckland. Sin embargo, lo es. "Cinco días de vacaciones tuve solamente", dice, con una sonrisa, el sujeto del tenis del sentimiento. El que con cojones derriba el mito del talento."Sólo cinco días? Estuve en Ámsterdam y Praga con mi pareja [Yolanda], lugares que no conocía, que nunca había visto. Y después, empecé a entrenarme", advierte. A correr y a llegar a todas las bolas, que para David es casi lo mismo. Héroe silencioso de la última Ensaladera, héroe silencioso del top five , Ferrer se encuentra con LA NACION como si se tratase de un pibe de barrio que anda dando vueltas por Melbourne Park. Un pibe que, en realidad, tiene 29 años y una vida de un lado del mostrador de la red."Mi inicio de temporada es excelente. Mejor, imposible. Gané en Auckland, gané con comodidad en mi presentación aquí y estoy mentalmente muy bien preparado. Físicamente, también estoy bien. Diez puntos", relata, en un rincón, entre tanto court, apartado del viento, unas cuantas horas después de barrer a su primer estorbo: un 6-1, 6-4 y 6-2 en una hora y 44 minutos sobre el portugués Rui Machado. "Siempre te queda el recuerdo, hombre, de ese gran partido contra Juan Martín y haber conseguido otra vez la Copa Davis. Con el tiempo, seguramente, va a tomar una dimensión mayor", describe, con analítica frialdad. Es que la sangre solo le hierve cuando destroza adversarios."No hay secretos para ganar la Davis. Los argentinos la van a ganar algún día, son muy buenos jugadores. Tienen un equipo suficientemente bueno para ganarla. Además, este año van a jugar como visitante de Alemania, ¿no es así? Y luego todo en casa?", señala con su natal acento de Alicante; en algunas palabras, ciertamente indescifrable.-¿Lo peor es la primera serie?-Si pasan la primera etapa, tienen grandes opciones de llegar a la final. Y si llegan a otra final, pues, hombre, puede pasar de todo. Si Juan Martín está bien físicamente y David lo acompaña, son dos grandes...