El presidente de la bonanza económica y el poder total

En un país marcado por la inestabilidad política y en donde el canto "que se vayan todos" era quizá más popular que en la Argentina, Rafael Correa logró lo impensable: gobernará Ecuador durante diez años.Pero ése no es el único récord que batirá el presidente, que asumió ayer su tercer mandato. Correa gobernará hasta 2017 con la mayoría absoluta en la Asamblea Nacional (Parlamento), ya que los legisladores de su partido, Alianza País, consiguieron 100 de los 137 escaños en las elecciones del 17 de febrero.En 183 años, ningún otro mandatario ejerció el poder bajo estas circunstancias. La duda es qué alcance tendrá ahora la "revolución ciudadana" -su proyecto político- en manos de un presidente que tiene un poder casi total."En el plano político se va a profundizar su control sobre los poderes del Estado. La mayoría parlamentaria le da aún más control a Correa, que también tiene las riendas de la justicia. Creo que su modelo basado en el autoritarismo se va a agudizar", dijo a la nacion Simón Pachano, analista político de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso) de Ecuador.El presidente ecuatoriano, al igual que su par boliviano, Evo Morales, siguió el modelo de la revolución chavista: la concentración del poder público bajo el pretexto de la lucha contra los poderes establecidos y la ofensiva contra la prensa.Pero Correa está muy lejos de parecerse al fallecido presidente venezolano Hugo Chávez o al actual mandatario, Nicolás Maduro, y Ecuador no es Venezuela. Por el contrario, el país goza de una bonanza económica gracias, en parte, a la administración de Correa y también a los altos precios del petróleo.El proyecto económico de Correa, que llegó al poder en 2007, se basó en dos ejes: el gasto social y la inversión estatal en infraestructura. Aunque sus opositores critican la falta de inversión privada y el aumento desmedido del gasto público, le reconocen la modernización del sistema vial y haber bajado la pobreza, que el año pasado fue del 27,3%, 10 puntos menos que en 2006.Correa dejó en claro que la revolución seguirá por este camino de lucha contra la pobreza. También repitió que buscará cambiar la "matriz productiva" para romper la dependencia del país con el crudo. Por eso ahora apuesta por un modelo de extracción minera.Lo que enciende las alarmas en los ecuatorianos no es el rumbo económico de la "revolución"; es la acumulación de poder del presidente. Los opositores denuncian que Correa domina el Poder Judicial, luego de haber...

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