Precisas y sutiles constelaciones aéreas

Treptikon / Dirección: Mariana Sánchez / Coreografía: Emiliano Sánchez Alessi / Vestuario: Carolina Espíndola / Video: Andrés Saitta / Intérpretes: Agostina Degasperi, Lucila Rocca, Luciana Losada, Lucila Jrimian, Luciana Rotemberg, Magalí Martofel, Mariana Makrucz y María Teresa Ciaria / Sala: Club de Trapecistas, Ferrari 252, Caballito / Funciones: sábados, a las 21, y domingos, a las 20.Nuestra opinión: muy buena. A los sones de la música de Erik Satie se descuelgan una tras otra a emprender el vuelo, para volver a encaramarse luego en el balcón de altura al otro extremo de la pista. Como un armonioso mecanismo de relojería surcan el aire, forman constelaciones diversas. Las trapecistas comienzan un viaje hacia alturas espaciales y conceptuales. Treptikon es una nueva escala en ese recorrido iniciado con Mamushka, Mandalah y Brumadhia , los espectáculos previos de la compañía Circo Negro, siempre con dirección de Mariana Sánchez.Una de las acróbatas, Agostina Degasperi, desciende entreverada en un aro, ¿o se trata de un aro que baja realizando una sutil coreografía sobre el cuerpo de la artista? Difícil discernir quién sostiene a quién. A ras del suelo pasará una bandada de pajarracos graznando, en gracioso contrapunto que recuerda la torpeza del albatros en tierra contrastando con su majestuosidad en vuelo. O al cacareo pedestre de las aves de corral frente al elegante entrecruzamiento aéreo de las gaviotas sobre las olas marinas. El canto lírico de María Teresa Ciaria atraviesa la escena con una solemnidad que lleva la marca de un guiño de humor, sea con paso displicente de gran diva o columpiándose cual querubín.Pero no sólo los personajes por momentos centrales o las coreografías de dibujo grupal exhiben una marcación...