Ser parte del movimiento olímpico

Frecuentemente, a los argentinos nos gus ta trazar comparaciones. Es algo que se acentúa en el deporte. Cada competencia, cada atleta es cotejado con el mejor de otro país y con facilidad caemos en contundentes afirmaciones. Podemos sentirnos fracasados si no ganamos la Copa Davis aunque lleguemos a la final o los mejores del mundo gracias a Messi.Entre las muchas cosas que decimos y repetimos, una "verdad instalada" es que la Argentina no tiene cultura olímpica. ¿Eso es cierto? Si la cultura se origina a través de los años y la tradición de los pueblos, podemos contar que el 23 de junio de 1894 se hizo lo que podría considerarse la primera asamblea del Comité Olímpico Internacional. Ese día, el de la fundación, Pierre de Frédy, el Barón de Coubertin, estuvo acompañado por apenas 11 personas. Entre ellas se encontraba José Benjamín Zubiaur, un abogado y profesor paranaense, y apasionado difusor de la educación y del deporte. Apenas 12 países participaron de la creación del COI, y uno de ellos fue la Argentina. La asamblea que recibirá Buenos Aires desde pasado mañana representa a 204 países (10 más de los miembros que reúne la ONU). Y será el primer acto oficial del COI en nuestro país, ya que antes sólo hubo visitas de evaluación por antiguas postulaciones.En esta asamblea se definirá, además de la sede de 2020, el próximo presidente, el que reemplazará a Jacques Rogge. Pero, ¿es importante la asamblea para el deporte argentino? Es un elemento más para acercarse al movimiento olímpico, para seguir recuperando la memoria, esa cultura que alguna vez tuvimos, pero que en ciertos tramos difíciles de nuestra historia quedó olvidada hasta casi perderse...

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