El Oscar ya empezó a mostrar sus primeras decisiones sorpresivas

El primer veredicto del Oscar a la mejor película extranjera dejó a muchos con las manos vacías y avivó una polémica que no terminará ni siquiera con la entrega de la única estatuilla que otorga la Academia de Hollywood al cine del mundo, el próximo 26 de febrero.

La única certeza es la confirmación del favoritismo amplio con el que llega a la definición la película candidata desde el comienzo, la alemana Toni Erdmann, de Maren Ade. Encabeza hoy todos los pronósticos, al frente de la primera selección anunciada el jueves por la noche por la Academia de Hollywood. De los 85 títulos presentados por otros tantos países quedaron los representantes de Alemania, Australia, Canadá, Irán, Dinamarca, Noruega, Suecia, Suiza y Rusia.

La decepción es grande en toda América latina. En la Argentina se sabía que las chances de El ciudadano ilustre eran escasas, pero también es sabido que el Oscar extranjero suele ser el reino de las sorpresas (allí está la flamante lista de nueve finalistas para corroborarlo). Pero pocos imaginaban que iban a quedar afuera dos títulos de los que se hablaba mucho en el mundo: la chilena Neruda, de Pablo Larraín, y la venezolana Desde allá, de Lorenzo Vigas.

La primera figuraba en muchísimas listas previas de posibles finalistas, sobre todo porque Larrain es el director latinoamericano de moda en Hollywood, ya instalado con mucha fuerza allí gracias a que su primera película en inglés, Jackie, tiene posibilidades muy factibles de instalarse en la lista de nominados, sobre todo, por el lado de su actriz protagónica, Natalie Portman. En cuanto a Desde allá, después de llevarse el León de Oro en Venecia 2015, tuvo una importante carrera internacional y el reconocimiento como una de las más valiosas muestras del cine de esta región en los últimos tiempos.

El impacto en América latina es escaso frente a las reacciones que despertó entre la crítica europea la omisión de Elle, de Paul Verhoeven (representante de Francia), junto a otros conspicuos títulos de los que mucho se hablaba en los días previos: la española Julieta, de Pedro Almodóvar, y el gran documental italiano Fuocoammare, de Gianfranco Rosi.

El caso de Elle es el más notable...