Todos los ojos puestos en Malvinas

Antes de que La dama de hierro se estrenara en el Reino Unido, el crítico del diario conservador Daily Telegraph se anticipó a los previsibles debates que la película habría de deparar allí con una frase esclarecedora: "La reacción de la gente dependerá de la actitud que Margaret Thatcher tuvo con cada uno". Y como primera deducción de sus propios dichos, dijo que la película "no gustará mucho en la Argentina".Casi todo lo que se diga de La dama de hierro a la salida de cada función de la película en la Argentina, a partir del jueves, seguramente tendrá que ver con esos 15 minutos cruciales que enfocan con exclusividad lo ocurrido en 1982. "¡Las islas Falkland pertenecen a Gran Bretaña y las quiero de vuelta aquí!", una de las frases más famosas pronunciadas por Thatcher durante uno de los momentos cruciales de sus 11 años de primera ministra se repite en el film al pie de la letra.Es el momento en que la líder tory interpretada por Meryl Streep deja de atravesar con su auto las quejas de viva voz que contra el vidrio de su auto le acercan manifestantes callejeros y huelguistas, y hasta parece olvidarse de la bomba que el Ejército Republicano Irlandés hizo estallar en 1984 y casi la mata junto a su marido Denis (Jim Broadbent en la película).Es el momento en que el film llega a 1982 y se ocupa de la Guerra por las Malvinas. Allí, Streep convierte a su Margaret Thatcher en una líder resuelta, decidida y ejecutora de decisiones que se toman sin vacilación, aún cuando los más altos funcionarios y asesores del área de Defensa de su gabinete no parecen dispuestos a tanto y hasta se animan a no minimizar el...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR