El oficialismo siempre es un mal 'negocio' para el periodismo

En la última década fue floreciente en la Argentina -y en América latina en general- el "negocio" de los medios oficialistas. Es cierto, siempre y en todos los ámbitos existieron obsecuentes e interesados, pero nunca habían sido tan prósperos en este sector. Empresarios periodísticos encontraron allí una manera de subsistir a la crisis global que viven las firmas informativas tradicionales y aparecieron hombres de negocios dispuestos a debutar en un ámbito desconocido, pero sencillo: difundir la bajada de línea. Se sumaron compañías de actividades reguladas por el Estado, que encontraron allí una forma de "reaseguro" para poder cuidarlas o incrementarlas.

Pocas empresas de medios se enfocaron de manera más nítida y sin ningún pudor a este "negocio" del oficialismo mediático como Albavisión, el más extendido conglomerado audiovisual de América latina, liderado por el empresario mexicano Remigio Ángel González González. Sus seis canales y 82 radios en 10 países son casi siempre oficialistas, independientemente del partido político o la ideología que gobierne.

Mientras Morales, tras aquella conversación epifánica con Néstor Kirchner en 2008, ejercía desde los micrófonos de Continental un oficialismo genuino y convencido, Albavisión se hizo cargo de la emisora, replicando en la Argentina el acuerdo que aquella empresa ya tiene con la española Prisa -dueña de la radio porteña- en Chile. Esos pasos se dieron hace por lo menos un año y fueron revelados por la nacion en julio pasado.

Hasta entonces, Prisa lidiaba con el enorme problema que le creó la ley de medios: la imposibilidad de conservar sus radios en el país por la restricción aplicada a las firmas extranjeras. Tal vez Morales no lo sepa, pero la última renovación de su contrato se firmó en la sede de la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (Afsca), presidida entonces por Martín Sabbatella, y "bajo coacción", según reconoció una fuente empresaria que participó de esa negociación.

Desde entonces, el plan de adecuación de los españoles avanzó hasta tener aprobación definitiva un día antes de que Mauricio Macri decretara la intervención del organismo (decisión revisada ayer por un fallo judicial que será apelado hoy). Albavisión había logrado "emprolijar" sus papeles mucho antes. Y justo después de que Remigio González pusiera el canal "a disposición del gobierno", según un mail...