El nuevo viaje de Alexander Payne

Alexander Payne puede desconcertar a cualquiera. Como ocurrió a mediados de enero, cuando le tocó disfrutar de la consagración de su nueva película con el Globo de Oro y aparecer poco después en una fiesta luciendo unos llamativos tapones para los oídos de color rosado. Allí decía a todo el que se acercaba a felicitarlo que sólo de esa manera sus oídos soportarían los gritos y saludos de la gente por sobre una banda sonora permanente y de por sí aturdidora.¿Qué otra cosa podría ocurrir con un aplaudido cineasta que regresa después de siete años de silencio fílmico con una obra cargada de nominaciones a los premios más importantes de Hollywood y proclama que de ahora en adelante está dispuesto a encarar su carrera con acciones y decisiones rápidas?Siete años separan a Los descendientes, cuyo estreno en la Argentina anuncia Fox para hoy, de la anterior ?e igual de aplaudida? película de Payne, Entre copas. En una rara coincidencia del destino, ambos films tienen como denominador común el hecho de haber obtenido cinco nominaciones para el Oscar. Aquel film sobre las andanzas de un hombre abrumado que sale en busca de respuestas a los interrogantes de su vida a través de un viaje por la ruta del vino en Napa Valley se llevó la estatuilla al mejor guión adaptado.Hoy, Los descendientes aspira al Oscar en igual rubro, pero es más factible ?al menos en las especulaciones previas? que en su caso la estatuilla más segura termine en manos de su protagonista, George Clooney. También se habla mucho de las genuinas posibilidades que tiene Los descendientes en la lucha por convertirse en la mejor película de 2011 para la Academia de Hollywood. En ambos casos (film y actor), el adversario más fuerte es El artista, un film que la crítica internacional no coloca muy lejos, con adjetivos como...