Martín Tetaz: 'El Gobierno no tiene incentivos para cambiar después de las elecciones'

Estudió Economía en la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), hizo el posgrado en Psicología Cognitiva en la Universidad de Buenos Aires (UBA) y el doctorado en Ciencias de la Gestión en UNLP (tiene la tesis en elaboración); fue profesor universitario y consultor económico, y tiene hechas varias publicaciones académicas

Martín Tetaz no les escapa a los problemas económicos de la Argentina. Dice que "siempre se puede estar peor", pero prefiere salir de la coyuntura y pensar en los nuevos desafíos que genera la disrupción tecnológica. "Las patentes en inteligencia artificial están creciendo a tasas del 35% anual. Eso llegará al mercado en dos o cuatro años. Cualquier variable que crezca al 35% es explosivo", dice en un diálogo con la nacion el economista y autor de Nada será igual: un viaje a la economía del futuro.

"En un extremo, la inteligencia artificial desplaza a un montón de empleo potencial y, en el otro, ayuda a potenciar la productividad. Eso ya está pasando", comenta.

-¿Cómo impacta eso en términos de desigualdad?

-El avance tecnológico creará también puestos de trabajo que no conocemos. Algo de todas las revoluciones industriales anteriores es que siempre existió el fantasma de la pérdida de empleo y nunca ocurrió, ni con el ludismo en la revolución industrial inglesa del siglo XVIII, ni tras el libro de Jeremy Rifkin, El fin del trabajo, de 1995. La economía en los siguientes 20 años explotó en cantidad de empleos, incluyendo el fenómeno de Asia. Todos esos análisis fracasan al pensar que la caja es siempre la misma; se piensa en la economía como un juego de suma cero, donde no se crece. Si todos los trabajos, de pronto, son hechos por un algoritmo, las personas se van a quedar sin trabajo. Pero no se ve que la economía multiplica la productividad de manera espectacular y aparecen más empleos, que antes no se pensaban.

-¿Por ejemplo?

-John Maynard Keynes dijo en la década del 30, cuando hablaba de la economía de sus nietos, que en 2030 íbamos a poder trabajar solamente tres horas por día e íbamos a mantener el mismo nivel de ingresos que tenía un inglés de clase media de ese entonces, por el avance que iba a tener la productividad. Si se miran los datos, tuvo razón Keynes en la primera parte, el ingreso per cápita se multiplicó por siete en los últimos 90 años; nunca fuimos tan abundantes en la historia de la humanidad. El capitalismo triunfó en ese sentido, pero no trabajamos nada más que tres horas. Trabajamos más de las que...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR