La máquina de hacer música

La batiseñal vuelve a brillar en el cielo porteño y estos superamigos de la música acuden al llamado sin demora. Hoy, el Sexteto Irreal volverá a los escenarios. Pero la buena noticia es que lo hará con un festival con nombre propio, en el que la orquesta de Christian Basso, Axel Krygier, Alejandro Terán, Fernando Samalea y Manu Schaller -"el primer sexteto de cinco integrantes"- será el plato principal y sus respectivos proyectos solistas, el acompañamiento ideal para sumergirse en un universo musical original, libre y sin prejuicios sonoros."Es una extraña mezcla entre lo retro, lo pictórico y lo futurista -arriesga Samalea, metafórico-. Si tuviésemos que elegir una textura sería una enredadera. Somos un quinteto que hace música instrumental, a veces cantada, en donde cambiamos de instrumentos y buscamos, de distintas maneras, siempre lo mismo: encontrarnos, perdernos en la música y volvernos a encontrar idealmente para los finales", define lo indefinible Schaller.La historia musical de los integrantes del Sexteto Irreal podría definirse, más que como una ruta, como un constante cruce de caminos. Como una película de David Lynch ambientada en la Buenos Aires de los años 80 que desde allí se teletransporta al mundo, con escenas registradas en las ciudades más cosmopolitas del planeta: de París a Pekín y de Los Angeles a Tánger.Sin coordenadas específicas de partida, el germen de esta orquesta polirrítmica con alma de rock bien podría ser el álbum Obediencia debida, que marcó el debut de Instrucción Cívica, en 1985. Allí, detrás del dúo formado por Kevin Johansen y Julián Benjamín, aparecían Terán, Samalea y Krygier. También se podría rastrear algo en Clap, la banda que para la misma época unía los caminos de Samalea y Basso, o incluso en Fricción y en Las Ligas, ese supergrupo que armó Charly García en 1986 y del que también formaron parte Samalea y Basso. Y no habría que olvidarse de La Portuaria, una suerte de continuación de Clap, de la que terminaron formando parte Basso, Terán y Krygier.Siempre es hoyLa música en los años 80 los unió arriba de trasnochados escenarios y en los estudios de grabación de buena parte de los discos más importantes de esa década (y de algunos de la siguiente también). Juntos o por separado, Samalea, Basso, Krygier y Terán atravesaron la escena rock y pop vernácula con estilo, originalidad y prepotencia de trabajo. Pero ninguno de ellos parece estar dispuesto a mirar por arriba de su hombro. Para ellos, siempre es hoy."Para...