San Lorenzo sufre las consecuencias del doble homicidio

SAN LORENZO, Salta.- Ya nada es ni será igual aquí. Al estupor inicial por la brutal violación seguida de muerte de las turistas francesas lo sucedió una especie de trauma colectivo que hoy hunde a muchos http://www.lanacion.com.ar/1398817-como-es-el-barrio-donde-viven-los-principales-implicados-del-asesinato-de-las-francesas en el miedo y la zozobra, y, a algunos, en la suspicacia y hasta en la incredulidad.Si bien todos califican el doble homicidio como "un hecho aislado, sin precedente en esta villa segura y tranquila", hay consecuencias palpables: asoma un temor inédito que, en algunos sectores, apunta a la integridad física de las personas, sobre todo de niños y jóvenes locales.Además, no pocos lugareños descreen de que al menos dos de los tres detenidos sean los reales autores del bárbaro crimen. Sostienen, convencidos, que "cholitos" (jóvenes de dinero) protagonizaron el hecho junto con sólo uno de los imputados, Gustavo Lasi. "Ellos mismos le aseguraron su http://www.lanacion.com.ar/1394076-queda-libre-el-unico-detenido-por-el-crimen-de-las-turistas-francesas a través de dos costosos abogados, lo mandaron a que enfrentara los cargos, inculpara a dos inocentes, enemigos conocidos de su familia, y diluyera así la responsabilidad de los verdaderos culpables", dice uno de los que avalan esa teoría.Los locales recuerdan un solo antecedente tan revulsivo: hace 13 años, en la capital, el secuestro, la violación y el asesinato de los hermanos Melany y Octavio Leguina, de 6 y 9 años, por un ajuste de cuentas por drogas."La gente no acepta y no cree que lugareños puedan haber violado y matado así. Piensan que la gente acá es pacífica y no tiene ese tipo de perversión", explica Germán Salazar, que atiende El Duende de la Quebrada, el restaurante sito en el ingreso de la reserva turística, donde Cassandre Bouvier y Houria Moumni hicieron su primera parada el fatídico 15 de julio. "Creer lo contrario -dice- es aceptar que ya no se sabe quién es quién, y eso trae malestar, desconfianza y pánico."Pero el miedo aquí es taxativo. La sensación de inseguridad exime los robos, la delincuencia armada o los homicidios: el temor apunta a la violencia sexual provocada por el alcohol y las drogas, el presunto cóctel homicida que acabó con las vidas de dos brillantes estudiantes francesas. Según un sondeo de LA NACION, el alcoholismo, en todas las edades, es aquí un flagelo que combaten amplios sectores. Los de menores recursos se perfilan como los más vulnerables.Los...