Ledesma, dueño de la Catedral

"Son las carreras soñadas", repetía en la sala de prensa Christian Ledesma, mientras su esposa y sus hijos aguardaban sentados en un rincón a la espera del gran protagonista del fin de semana del Turismo Carretera en Buenos Aires. Es que cuando gana Ledesma, no hay medias tintas. Sale a fondo desde el primer momento y no da tregua. Esta vez, en un Gálvez casi desolado por la falta de público (que ya se detallará), nadie pudo con él en ninguna tanda. Ni en los entrenamientos, ni en la clasificación, ni en las series... ¿Por qué debería ser distinto en la final? Basta con recordar que la llegada del playoff (o la Copa de Oro, como se dice oficialmente) se debió al abrumador dominio del marplatense en la categoría en 2007.Es cierto. Chevrolet fue beneficiado con otro toque reglamentario y esta vez dominó en el Gálvez, donde históricamente la marca fue protagonista. Pero no sólo esa suba en la compresión en sus motores fue el motivo para este nuevo panorama. Hay un detalle que no es menor: ya no se sortean los impulsores para sus usuarios. Y este fin de semana se vieron los resultados.El escenario y el ganadorHoy, justamente, se cumple un año de su último triunfo en el TC, en Olavarría. Pero Buenos Aires es el sitio predilecto de Ledesma. Tanto en 2002 como en 2007 ganó en dos ocasiones. Luego, una vez en 2008, otra en 2010 y ayer, seguramente la victoria con menos gente en las tribunas.El frío fue determinante. También es cierto que en las épocas de ruta las multitudes enfrentaban temperaturas polares. Pero no es casual que en esta época la...