Lanús y Colón, a pedir de boca

Fue uno de esos desafíos en los que ambos equipos llegaban con expectativas, pero que el resultado terminó apagando el fuego. El 1-1 entre Lanús y Colón no le sirvió a ninguno; a quien más benefició fue al líder, Boca, ya que ni granates ni sabaleros lograron ubicarse como únicos seguidores de los xeneizes y, por ahora, sigue siendo Racing la amenaza más cercana, a cuatro puntos.La intención de Lanús por mostrarse protagonista quedó en evidencia desde el primer momento. Envalentonado y en la comodidad de actuar en su terreno -poco antes del partido fue regado con el objetivo de que sea más veloz-, el equipo local salió con fiereza. Con un Regueiro incontrolable por la banda izquierda, el conjunto dirigido por Schurrer generó cuatro situaciones clarísimas frente al arco santafecino antes de que el reloj marcara 15 minutos. Incluso, en la primera de esas acciones, nada menos que a los dos minutos, derrumbó la resistencia del arquero Marcos Díaz: Pereyra inició el avance por el centro y, tras un centro de Valeri y la desinteligencia de la última línea, el propio uruguayo Pereyra se encontró cara a cara con Díaz y definió de derecha, logrando su primer festejo en el fútbol argentino.La desventaja tempranera le hizo cambiar los planes al entrenador Sciacqua. Pero más allá de algunos gritos del DT y del referente, Bichi Fuertes, la defensa continuó siendo una gran invitación para los mediocampistas y atacantes de Lanús. Candia, por el lateral derecho, no tuvo manera de controlar al uruguayo Regueiro, que desbordó todas las veces que se las propuso. En una de ellas, Leandro Díaz remató como pudo un centro con mucha pimienta, el arquero de Colón alcanzó a manotear y la pelota pegó en el travesaño. En otra escapada de Regueiro, Valeri cabeceó de pique al piso y la pelota se perdió apenas contra el palo izquierdo. El circuito encabezado por Balbi, Camoranesi, Pereyra y Valeri frustró a Colón, que solamente salió del asedio en los últimos 10 minutos, cuando el propio conjunto local sintió el desgaste y disminuyó la intensidad de su marcha. Pero así y todo, Colón sólo pudo rematar una vez hacia la valla de Marchesín: pero el tiro lejano de Higuaín fue intrascendente.Lo que ocurrió en la segunda parte fue muy curioso e irritante para los hinchas granates. Porque si bien Lanús prosiguió siendo el dominador, falló constantemente en la definición. En ese escenario, Colón, con limitaciones pero empujado por el coraje de Fuertes y Moreno y Fabianesi...