Justicia independiente para investigar a Milagro Sala

Los diversos procesos criminales que involucran a la líder del Movimiento Tupac Amaru, , han de poder cursarse en un marco de absoluto respeto por la independencia e imparcialidad judiciales. Esto, pese a que quienes simpatizan con ella han puesto en marcha una intensa campaña internacional merced a la cual organismos como las Naciones Unidas y la Organización de Estados Americanos han solicitado su liberación. En la misma tesitura se sumaron localmente las voces de Eugenio Zaffaroni (quien llegó a proponer la intervención de la Corte Suprema para que pueda seguir los juicios en libertad), Horacio Verbitsky y Gustavo Cinoci, espadas del kirchnerismo, que argumentan que los fueros de Sala derivarían de su carácter de diputada del Parlasur, organismo que aún no se ha conformado en su totalidad.

Mientras tanto, la dirigente sigue preventivamente detenida, al tiempo que las múltiples investigaciones judiciales continúan su curso, incluyendo aquellas vinculadas con la utilización fraudulenta de fondos públicos destinados a construir viviendas sociales que Sala habría utilizado para presionar a sus eventuales beneficiarios, exigiendo contraprestaciones forzosas en sus actividades políticas.

El reclamo de los organismos internacionales llegó al Poder Ejecutivo Nacional a pesar de que la actuación judicial se tramita a nivel provincial y que está en manos de jueces que no dependen del Poder Ejecutivo, como es habitual en las repúblicas democráticas, en las que la independencia de los magistrados está en la esencia misma de la división de poderes.

Conocidos activistas locales y extranjeros presionan incesantemente para lograr la rápida liberación de Sala. No se puede pasar por alto que si esto ocurriera podría darse a la fuga o restringir y dificultar la obtención de los elementos probatorios necesarios para determinar su responsabilidad en la defraudación al Estado nacional, particularmente por su condición de cabeza de una organización paramilitar cuyos miembros desfilaron uniformados en reiteradas ocasiones y han sido, además, responsabilizados de golpear a los disidentes, amenazarlos, intimidarlos y vejarlos.

Los testimonios prestados ante la Comisión de Seguridad Interior de la Cámara de Diputados de la Nación por Carmen Fernández, Soledad Mendoza y el ex secretario gremial de los docentes de Jujuy Víctor Mendoza son más que inquietantes, pues parecen acreditar una perversa mecánica de hostigamiento y extorsión empleada por la dirigente jujeña...