El juego de adivinar que se estrena un programa

Tal vez deba ser así. Tal vez la televisión deba ser ese baúl lleno de sorpresas, que a veces parece caja de Pandora y otras caja de ese regalo que nunca supimos que siempre quisimos.Es posible que si en lugar de promocionar sus ciclos hasta el hartazgo, la pantalla chica dejara que su público descubriera por sí mismo su capacidad ilimitada para entretener todo sería mucho más fresco, mejor. Ciertamente haría del zapping una actividad más espontánea y disfrutable especialmente cuando el espectador se encontrara de frente y sin la insistencia de ningún plan de marketing con esos programas que no puede perderse. El problema es que ante la enorme oferta de canales y ciclos son mínimas las posibilidades de encontrar de casualidad esa serie fantasma que hay que ver...