De jockeys, padrillos y haras

Una cabeza separó a Jesús Rosales de convertirse en el primer jockey argentino en ganar en la República Popular China. El piloto fue segundo a esa distancia en la reunión de la Chengdu Dubai International Cup, resuelta en el hipódromo de la capital de la provincia de Sichuan, donde, según Wikipedia, existe la mayor reserva de Osos Pandas. Rosales está al caer; regresará a Buenos Aires por unas vacaciones y, antes de volver a Dubai en septiembre, verá si puede correr algunas carreras aquí.

Iván Monasterolo se graduó en forma meteórica de jockey y le está pasando lo que a muchos aprendices de moda: la pérdida del descargo se traduce en menos compromisos de monta. Ahora gana salteado. Ni antes era tan bueno ni ahora tan malo.

Hablando de jockeys, San Isidro acaba de autorizar al aprendiz de tercera Carlos Saúl Pérez Guillo a conducir caballos de Carly Etchechoury y los Maldotti. Sus triunfos no tardarán en venir.

Otro tema. Shared Belief, un hijo de Candy Ride, continúa liderando el ranking que respalda la IFHA y auspicia Longines. Estar arriba equivale a ser el mejor caballo del mundo. Candy Ride es nieto materno de Candy Stripes, que aquí dio al estupendo Equal Stripes y es a lo que quería llegar. Una hija de Equal Stripes hizo el precio mayor del...