El jefe del Ejército estrenó su promoción junto a la Presidenta

En medio de fuertes críticas de la oposición, la presidenta Cristina Kirchner encabezó ayer el acto de ascensos militares y le entregó el diploma de teniente general al controvertido jefe del Ejército, César Milani, acusado e investigado en causas por delitos de lesa humanidad durante la última dictadura militar. Está denunciado, además, como el organizador de un aparato de inteligencia interna desde el comando de su fuerza.La ceremonia se realizó en el Salón Blanco de la Casa Rosada, en el que 240 altos mandos militares recibieron de manos de la Presidenta el diploma y el sable correspondientes a los oficiales que alcanzan los grados de general de brigada, contraalmirante y brigadier.Los gestos de Cristina Kirchner fueron premeditadamente afectuosos hacia el general cuestionado. Le hizo una sonrisa, le dio una felicitación y le estrechó la mano. Desde el público se escuchó un esbozo de aprobación, rápidamente acallado, y un aplauso apenas más intenso que en los otros casos. Durante la jornada, Milani fue el blanco de fuertes críticas por parte de varios dirigentes de la oposición.El acto fue breve, austero, frío y protocolar. Otro rasgo de euforia provino de algunos familiares que aplaudieron y vivaron a los oficiales ascendidos cuando pasaban a saludar a la Presidenta, que estaba acompañada por el jefe del Gabinete, Jorge Capitanich, y el ministro de Defensa, Agustín Rossi.En medio de miradas cómplices y sonrisas nerviosas, la Presidenta también entregó los diplomas correspondientes al jefe de la Fuerza Aérea, brigadier general Mario Miguel Callejo, al jefe de la Armada, vicealmirante Gastón Erice, y al jefe de Estado Mayor Conjunto...

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