Isabelle Huppert también ríe

ROMA.- Otra gran actriz, esta vez la francesa Isabelle Huppert, cautivó ayer al público del Festival Internacional del Cine de Roma, que no paró de reírse con Mon pire cauchemar ( Mi peor pesadilla ), una divertidísima comedia de la directora también francesa Anne Fontaine ( Coco antes de Chanel ), que coprotagoniza con el cómico belga Benoit Poelvoorde.En el film, una inédita Huppert, de 56 años, interpreta a Agathe, fría, antipática e insoportable ejecutiva de la alta burguesía parisina que de repente ve su vida alterada por su peor pesadilla: es decir, Patrick (Poelvoorde), el padre de un compañero de colegio de su hijo, totalmente opuesto a ella. Si ella vive en un elegantísimo y espectacular departamento de una de las zonas más paquetas de París; él lo hace con su hijo en la parte trasera de un furgón. Ella dirige una importante fundación de arte contemporáneo; él se las rebusca haciendo changas de todo tipo y con la ayuda de la asistencia social.Si ella pasó siete años en la universidad, él pasó siete años en la cárcel. Si ella es extremadamente fina y le encanta el debate intelectual, él es de lo más vulgar, amante de la bebida, de las mujeres tetonas y fáciles y de los chistes verdes. En suma, se trata de dos personas en las antípodas, que nunca deberían haberse encontrado, pero como sus dos hijos se hicieron amigos íntimos, de repente deben frecuentarse.En esta comedia de lo más hilarante también actúa André Dussolier, amado rostro del humor más sofisticado del cine francés, en el rol de pareja de Agathe. A él también la irrupción del proletario pero mucho más vital Patrick, una persona más directa y sincera que las que frecuenta como editor literario, le cambia esa vida embalsamada que lleva junto con su gélida esposa.Después de idas y venidas, los dos polos opuestos, la hípercontrolada Agathe y el extrovertido Patrick terminarán juntos.Flaca, chiquitita y perfecta, la pelirroja y espléndida Huppert -musa de Claude Chabrol- contó en una conferencia de prensa que se divirtió muchísimo trabajando en Mon pire couchemar , que se exhibió fuera de concurso en la reseña de cine romana. En el film, cuando la esnob Agathe se suelta con un poco de alcohol, hasta se la ve en cuatro patas o bailando como loca en el caño, por supuesto vestida."Cuando esta mujer empieza a sentirse inquieta, se convierte en más frágil, pero también más libre de expresarse. Los dos protagonistas se ríen juntos. No hay nada más íntimo y erótico que compartir risas", dijo...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR