La interna de Juntos por el Cambio se agita a modo electoral

Todavía falta demasiado tiempo, pero el reloj electoral ya empezó su cuenta regresiva . Las señales emergen nítidas a medida que se va disipando el humo y atenuando el estruendo político-social que simbólicamente dejó la pistola de Fernando Sabag Montiel en su demencial intento de magnicidio contra la vicepresidenta Cristina Kirchner.

Las apresuradas expresiones (de deseos y de temores) que se instalaron sobre una eventual o probable candidatura presidencial en 2023 de la propia víctima, cuando aún no se había superado la conmoción, aparecieron en sincronía con lo que está sucediendo aceleradamente dentro de la principal coalición opositora. En paralelo discurren las angustias ciudadanas que la crisis económica irresuelta provoca y la crisis de representatividad política ahonda.

El telón de fondo de un intento de diálogo político entre el oficialismo y la oposición choca tanto con las desconfianzas y rencores acumulados como con los proyectos electorales de todos los involucrados.

El presente encuentra tantas dificultades en el pasado como en el futuro y tantas diferencias entre las fuerzas políticas en pugna como disputas dentro de cada una de ellas para avanzar en algún esbozo de coincidencias efectivas.

Los sondeos que partieron del oficialismo profundizan así conflictos internos y precipitan definiciones de los dirigentes para no quedar descalzados. También, despiertan las sospechas sobre el verdadero objetivo de esos acercamientos, que incluyeron mensajes enviados al propio Mauricio Macri. De demonio a interlocutor, en un solo paso (o maniobra).

La posibilidad de estar frente a un operativo de fragmentación de la oposición adquiere entidad no solo por los antecedentes del kirchnerismo en la materia, sino por la fragilidad de los lazos, las muchas suspicacias y las ambiciones en pugna que anidan dentro del mundo cambiemita.

El caso más elocuente de efervescencia y aceleración se observa en el segmento amarillo de Juntos por el Cambio.

La concentración en ese espacio de tres de los cuatro dirigentes de la oposición con mejor posicionamiento en las encuestas de imagen y de intención de voto explica el intenso movimiento que se registra en su seno. Otro tanto aporta el proceso de reconfiguración latente y aún sin resolución del espacio macrista tras la fallida experiencia de gobierno nacional que los devolvió al llano a los cuatro años. Ahora empezó el nuevo tiempo de definiciones sin posibilidades de detenerlo.

Retando a Mauricio

"Aunque...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR