Historias que pasan de las librerías a las salas de cine

A veces hay quienes se olvidan, en medio de la avalancha de las adaptaciones de cómics, videojuegos, aplicaciones y programas de TV al cine, de que antes de tanto material de origen variopinto la mejor sociedad de la pantalla grande estaba integrada con la literatura. Un cruce que muchas veces deriva en grandes películas destinadas a ganar premios y ser recordadas por años y que muchas otras consigue taquillas récord que emulan la sensación que el libro causó en las librerías. Por ese lado va Cincuenta sombras más oscuras, que se estrena pasado mañana en la Argentina.

La continuación de Cincuenta sombras de Grey llega a los cines con una lección aprendida: por más criticados que hayan sido el fenómeno literario y la película que inspiró -fue "premiada" como la peor película de 2015 en la entrega de los Razzie-, eso no impidió que más de treinta millones de libros vendidos se tradujeran en una recaudación de casi 600 millones de dólares en todo el mundo.

Claro quela ricacomplicidad entre la pantalla y las páginas resulta mucho más interesante cuando llega la época de premios. Es en ese momento, que es éste, cuando recordamos que sin los libros muchas de las películas más destacadas y reconocidas no existirían. Este año, de los nueve films nominados a mejor película en los Oscar dos comenzaron como proyectos literarios.

Talentos ocultos, estrenada la semana pasada, primero fue un libro de no ficción de Margot Lee Shetterly que contó el rol fundamental que tuvieron las mujeres negras que trabajaban en la NASA al tiempo de la carrera espacial. Tan fascinante era la historia que recopiló la autora que aun antes de terminar de escribir el libro ya había vendido los derechos para su adaptación cinematográfica. Y otra conmovedora historia verídica fue el motor de Un camino a casa, film nominadoa seis estatuillas (mejor película, actor, actriz de reparto, guión adaptado, fotografía y banda de sonido).

La película, que se estrenará la semana próxima, relata la epopeya de Saroo Brierley, un hombre nacido en la India que en la infancia quedó solo luego de resultar separado de su familia para ser adoptado por una familia australiana que lo ayudó a recuperar sus raíces. Gracias a las memorias del propio Saroo, publicadas este mes en la Argentina por Booket con el título de Un largo camino a casa, el film consiguióla necesaria autenticidad y la legitimidad que lo transformó en una de las sorpresas de la temporada de premios.

Más allá de las biografías y...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR