Guillermo: como una partida de ajedrez

Que los partidos hay que jugarlos es una afirmación tan añeja como el fútbol mismo. Pero sin desmerecer a Bolívar, Boca no puede perder. La obligación, incluso, es mayor. Después de igualar sus tres partidos anteriores, el conjunto de la Ribera tiene la necesidad de ganar por una diferencia de goles amplia, que le permita allanar su clasificación a los octavos de final de la Copa Libertadores.

Para Guillermo Barros Schelotto, la conformación del equipo fue similar a una partida de ajedrez. Porque podrá contar con Gino Peruzzi, ausente desde hace dos meses como consecuencia de una pubialgia (por la que fue operado), justo cuando Leonardo Jara sufrió un desgarro en su isquiotibial izquierdo durante el partido del último domingo ante Rafaela y se perderá al menos cinco partidos.

Otro regreso en el equipo azul y oro será Nicolás Lodeiro, quien tras formar parte del seleccionado de Uruguay en la doble fecha de Eliminatorias rumbo a Rusia 2018, ingresará por Pablo Pérez, que a la vez padece una sobre carga muscular en su cuádriceps derecho.

El que sí tendrá una gran posibilidad de mostrar las cualidades por las que Boca se fijó en él es el colombiano Frank Fabra, quien cuidará el lateral izquierdo en lugar de Jonathan Silva.

El equipo, además, volverá a sentir el fervor de su gente. La Bombonera otra vez latirá fuerte, después de que la entidad cumpliese la sanción impuesta por la Conmebol (un partido a puertas cerradas), por el episodio del gas pimienta ante River, en el partido de vuelta de los octavos de la Libertadores 2015.

Será un buen momento para que Boca ratifique todo lo bueno que exhibió el sábado pasado...

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