El Gobierno no cede a los reclamos y rechaza cambios en el sistema

Funcionarios del gobierno de y gobernadores oficialistas descartaron ayer de manera tajante cualquier reforma en el sistema electoral antes de las elecciones presidenciales del 25 de octubre próximo y descalificaron a los partidos de la oposición que reclaman cambios o al menos la creación de una "boleta única suplementaria".

Pese a las escandalosas elecciones en , el principal argumento jurídico de la Casa Rosada es que para aplicar cambios se debería modificar la ley 19.945, que rige el Código Nacional Electoral (CNE). "Es un disparate cambiar el sistema y más en este momento, es imposible, en pleno proceso electoral", dijo a LA NACION el ministro de Justicia, Julio Alak.

Previamente, según consignó la agencia DyN, Alak había dicho que la oposición busca "descalificar" el sistema electoral con una propuesta "constitucionalmente inaceptable, legalmente inviable y políticamente disparatada". Respondió así a la propuesta de los partidos opositores de instituir la boleta única o la boleta electrónica para los comicios de octubre.

"El artículo 77 de la Constitución establece que 'los proyectos de ley que modifiquen el régimen electoral y de partidos políticos deberán ser aprobados por mayoría absoluta del total de los miembros' de ambas cámaras", dijo Alak.

"Legalmente es inviable porque resulta imposible que, en el medio de la campaña electoral, los legisladores puedan cumplir con los requisitos de formación y sanción de las leyes para modificar el Código Nacional Electoral", señaló.

Con una respuesta más política, el jefe de Gabinete, , que es candidato a gobernador bonaerense, dijo que detrás de la propuesta opositora hay una "vocación encubierta de realizar una alianza, que no hicieron cuando tuvieron los tiempos ordenados y conforme el Código Nacional Electoral, porque la boleta única permitiría esta alianza desde el punto de vista fáctico, en los hechos, prácticamente burlando la legislación...