Lanús fue lógico y dominó todos los frentes posibles

Transcurría el último minuto de descuento en la cancha de Lanús y una aislada escapada de Luciano Vietto dejó al delantero de Racing en posición de puntero derecho y cara a cara con Marchesín. Llegó el disparo y el arquero granate, junto a un palo, con esfuerzo, envió la pelota al córner, con lo que selló el triunfo de su equipo. De haber tenido destino de red, la jugada hubiera decretado una marcada injusticia. Porque, aunque exiguo en el resultado, el éxito del local fue tan contundente en el juego como amplio e indiscutido en los merecimientos.

El 1-0 le dejó al conjunto dirigido por los hermanos Barros Schelotto la tranquilidad de haber recuperado no sólo la tan deseada senda del triunfo, sino también el convencimiento de que el mostrado ayer es el camino que debe transitar. Batió a Racing con las armas más simples y lógicas y, a la vez, tan difíciles de corporizar en el fútbol argentino. Aplicó el criterio, lateralizó el juego, hizo circular la pelota y fue punzante en algunas oportunidades. Ante un equipo virtualmente partido como ayer lo fue Racing, el orden y la sapiencia para manejar los tiempos fueron suficientes.

Goltz dirigió el...

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