Fortalecida por el apoyo regional, la CIDH busca volver a la normalidad

ANTIGUA, Guatemala.- Sobre el final y tras mucha oratoria, el cierre de la asamblea de cancilleres de la Organización de Estados Americanos (OEA) produjo un fuerte respaldo a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y una contundente http://www.lanacion.com.ar/1589488-fracaso-de-venezuela-y-ecuador-en-su-embestida-contra-la-cidh, que habían lanzado una campaña en su contra."Todo esto se debe al voto secreto", decían ayer quienes celebraban el resultado de la votación de anteanoche, cuando bajaba el telón de la asamblea general de la OEA, luego de tres días de plenarios y bilaterales sobre temas de interés de la región. Esa reserva en la decisión de los gobiernos fue fundamental para hacer frente a la presión diplomática que había ejercido, sobre todo, el canciller ecuatoriano, Ricardo Patiño.Parece técnico, pero no lo es. Lo que hizo la OEA fue elegir tres comisionados para que definan la agenda de la CIDH, "joya" de la organización continental.Son hombres clave: por ellos pasan todos los expedientes que decide ese grupo de trabajo, del que depende la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión, otro de los blancos favoritos de Caracas y de Quito.Había seis aspirantes para llenar esas tres vacantes. El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, se empeñó en posicionar a Erick Roberts, un hombre de su confianza, al punto de delegarle nada menos que la defensa de su gobierno en cada uno de los expedientes que la CIDH le abrió en el pasado reciente. "Era meter un caballo de Troya", describió el Instituto para la Defensa Legal (IEL), de Perú.En línea con lo que anticipó LA NACION, lo primero que dejó en claro la votación de comisionados de la CIDH fue la derrota aplastante de Roberts. Con apenas 17 votos, quedó uno por debajo de los 18 necesarios para pasar a la segunda vuelta. "Fue humillante para los países del bloque ALBA", dijo una fuente bajo reserva."No da para más"Si esa derrota fue el primer dato, el segundo fue el categórico respaldo a lo que hace la CIDH, ya que el candidato más votado fue su actual presidente, el mexicano Jesús de Orozco.De extracción liberal, Orozco es quien pone la cara cada vez que Ecuador, Venezuela, Nicaragua y Bolivia reprochan la presunta "mentira, corrupción e intencionalidad política" de los informes de la comisión a su cargo, que denuncian...