La fiscalía pidió otra vez el desalojo del predio que está junto a la villa 20

La fiscalía porteña volvió a solicitar ayer el desalojo del predio tomado en Pola y Fernández de la Cruz, Villa Lugano, ante la jueza Gabriela López Iñíguez, ahora a cargo de la causa en lugar del subrogante Gabriel Vega.

Mientras, la Justicia continúa analizando evidencias y escuchas telefónicas para determinar las razones de la toma del predio que hasta el año pasado ocupaba la Policía Federal para el depósito de autos, que es objeto de una ley que obliga a su urbanización para viviendas sociales.

En ese sentido, dijeron fuentes de la causa, se afianza la pista sobre tres personas acusadas de "adueñarse" de tierras con fines lucrativos, ya que dentro del predio tomado los lotes estarían comercializándose por cifras que van de 8000 a 20.000 pesos.

Anoche, la jueza López Iñíguez no había decidido sobre el pedido de desalojo. El viernes pasado, la orden dictada por el juez Vega se suspendió luego de que la Policía Metropolitana consideró que sola no podía cumplir la orden, y al abrirse un canal de diálogo con los usurpadores, que tampoco prosperó.

Como informó LA NACION en su edición de ayer, en cinco allanamientos se encontraron boletos de compraventa de terrenos de otros asentamientos de la zona, que datan de 2002 y vinculan a los grupos de "okupas" con Marcelo Chancalay -ex líder de la villa 20 que trabajó para UNEN en las últimas elecciones-, Manuel Ríos y la familia Giménez.

El fiscal Carlos Fel Rolero, que investiga la toma que comenzó hace ocho días, y su par Gustavo Galante, a cargo del caso por la ocupación y desalojo de ayer, se reunieron anoche para determinar si estas personas tendrían alguna relación con las 20 familias que tomaron el predio de Zuviría y José León Suárez.

Ayer, en Fernández de la Cruz y Pola, las casillas y las casas precarias, de madera y cartón, seguían creciendo en número. Díaz, uno de los delegados y vocero de los "okupas", se quejó de que los agentes policiales intentaron "amedrentarlos"...