Fieles a una sana costumbre: emocionan

MAR DEL PLATA.- Allá están otra vez, abrazándose, saltando, festejando. ¡Cuántas veces los vimos hacer lo mismo y todavía nos emocionan! El Polideportivo es un solo grito con el "¡Argentina, Argentina!" que no se detiene, y en los rostros de los jugadores se refleja la satisfacción de haber conseguido lo que vinieron a buscar. Esa última fiesta con su afecto, con su gente, ya puede tener un final feliz con la clasificación.En el siglo pasado, la Argentina sólo logró dos participaciones olímpicas (Helsinki 52 y Atlanta 96). En este siglo, llegaron ellos, y la selección viajará a Londres 2012 para participar en la cita más importante del básquetbol mundial por tercera vez consecutiva, con el agregado de que en las dos anteriores se llevó nada menos que el oro en Atenas 2004 y el bronce en Pekín 2008.Esa grandeza instaló a nuestro país como el principal animador de la región. Veamos: entre 1980 y 1997, en ocho realizaciones del Torneo de las Américas, la Argentina llegó sólo tres veces al podio (bronce en el 80 y en el 93, y plata en el 95). En 1999 aparecieron Scola, Ginóbili, Nocioni, Sconochini, Montecchia y Leo Gutiérrez, iniciando la etapa más fructífera de la historia de nuestro básquetbol. Desde entonces, la reunión americana se repitió siete veces -incluyendo Mar del Plata 2011- y en todas ellas la bandera celeste y blanca se izó en el podio de las premiaciones, con los terceros puestos en 1999 y 2009, los subcampeonatos de 2003, 2005 y 2007, y el título de 2001 (Pre Mundial). El básquetbol argentino se convirtió en potencia. Siempre estuvo arriba y esta noche volverá a colgarse una medalla.La localía y el favoritismo con el que el equipo de Julio Lamas asumió esta competencia instalaron una enorme responsabilidad. Es más, los jugadores se lo plantearon como una obligación. "Cualquier cosa que no sea clasificarnos para los Juegos...