Festejos por el Día Internacional del Yoga

Con una multitudinaria sesión de asanas (posturas) y pranayamas (ejercicios de respiración), más de 30.000 personas se reunieron ayer en forma simultánea en la localidad india de Chandigarh, en el noroeste del país asiático, para celebrar el Día Internacional del Yoga, declarado en 2014 por la Organización de las Naciones Unidas (ONU). El festejo se replicó en cientos de lugares en todo el mundo y Buenos Aires también tuvo su agenda de actividades.

En la embajada de la India en el país, la organizadora de uno de los festejos anteayer, en la Usina del Arte, afirman que en la Argentina la disciplina es furor.

Si bien no hay datos oficiales, estiman que aquí existen más de 300 centros donde se enseña yoga. Sin embargo, la cifra sería mucho mayor si se sumaran los cientos de profesores que dictan clases de manera particular.

El yoga copó los salones en los gimnasios, los clubes de barrio, los centros de jubilados y, ahora, también los colegios. Hay para todos los gustos y exigencias. Están los puristas y los que buscan transpirar y prefieren clases más dinámicas. También las hay para adultos mayores, para chicos y para embarazadas.

Con el transcurso de los años llegaron al país otras versiones de la disciplina: yoga exprés, Bikram Yoga -que se practica en una sala a más de 40 grados-, Stand Up Yoga -una variación de Stand Up Paddle Surfing (SUP), que consiste en hacer posturas arriba de una tabla de surf- y hasta el concepto del Doga (por la combinación del término en inglés de dog y el de yoga) que se hizo popular en Londres y donde cada alumno puede llevar a su mascota para que le haga compañía durante la clase.

El boom

En los Estados Unidos, donde tiene unos 20 millones de seguidores, el yoga comenzó a...

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